Más del 40 por ciento de la población presentará problemas de trastorno del sueño por lo menos una vez en su vida, aunque para la mayoría, éstos no tienen mayor importancia y no se les presta la debida atención.Abraham Martínez, director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 27 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), indicó que los trastornos del sueño o dificultad para dormir son una de las causas de consulta más frecuente en el Instituto.El especialista explicó que el insomnio es la falta de sueño apropiado, implica dificultades para conciliarlo, despertares frecuentes o muy temprano; además de somnolencia durante todo el día a pesar de haber tenido un sueño de duración adecuada.Indicó que con frecuencia, la ingesta de medicamentos para tratar ciertas enfermedades ocasiona falta de sueño.El insomnio persistente eventualmente afectará las actividades diarias, provocará lesiones por accidentes y podría favorecer la aparición de depresión profunda.Incluso, añadió, se ha observado que las personas que lo sufren acuden más a las clínicas y hospitales por otros padecimientos.Esta patología, dijo, debe ser tratada inicialmente mediante la corrección de los malos hábitos para dormir.Los ruidos y las luces en la alcoba interfieren con el sueño, al igual que un compañero de habitación que ronca fuertemente; asimismo, los relojes que hacen mucho ruido pueden intensificar ansiedad.Cuando el insomnio persiste, aun después de haber tomado las medidas adecuadas para corregirlo, se utilizarán medicamentos, bajo supervisión médica.Los fármacos para tratar problemas del sueño se dividen en dos clases: las benzodiacepinas, los medicamentos más utilizados para el tratamiento del insomnio. Estas sustancias favorecen la comunicación entre las células nerviosas.Y las no benzodiacepinas, fármacos tales como los antidepresivos, antihistamínicos y los productos herbolarios.Las recomendaciones para las personas con problemas para conciliar el sueño son: evitar ingerir alcohol en la noche, el consumo de la cafeína por lo menos ocho horas antes de acostarse.También, dejar de fumar, establecer una hora fija para dormir, ubicar la computadora y la televisión fuera de la alcoba, relajarse con música, baños o leer antes de dormir; además de tratar de evitar situaciones estresantes o irritantes.Si las molestias para dormir persisten, finalizó el doctor Abraham Martínez, se recomienda consultar al médico familiar quien lo orientará para buscar opciones de tratamiento y el medicamento adecuado. OA