Uno de los consejos más habituales en las épocas de ola de calor, que comienzan frecuentemente a finales de la primavera y prevalecen a lo largo del verano, es evitar el consumo de cafeína en los diversos productos que la contienen, como el café, las bebidas energéticas y los refrescos. Asimismo, se desaconseja la ingesta de alcohol debido a que son bebidas diuréticas que, además de precipitar la excreción de orina, aumentan la temperatura corporal.Un dato interesante, de acuerdo con los expertos, es que el agua tibia, aunque parezca extraño, es la responsable de que nuestro cuerpo se refresque. Al entrar en contacto con la piel, se dilata, lo que provoca que la sangre fluya hacia las extremidades y genere una sensación de frescura.A pesar de lo que podríamos pensar con respecto a cómo ducharse para mantener una sensación fresca, los expertos desaconsejan las duchas matutinas con agua muy fría y, en cambio, recomiendan optar por baños nocturnos con agua tibia. Esto se debe a que la temperatura corporal sigue un ciclo de 24 horas, el cual desciende 2 °C. Este descenso tiene lugar para que el cuerpo conserve energía y proporcione a los órganos los requerimientos necesarios para funcionar adecuadamente. Por lo tanto, es beneficioso brindarle una “ayuda” en épocas como esta, ya que estos ciclos podrían interrumpirse en fechas cálidas.Las comidas con mucho picante también ayudan a mantenernos frescos, porque elevan la temperatura interna del cuerpo. Por eso, cuando se come algo muy condimentado, es común sudar. A la larga, la expulsión del sudor logra evaporar la humedad corporal, lo que refresca. Aunque un helado o agua fría también pueden funcionar, su efecto será sólo momentáneo.Mike Farquhar, consultor en medicina del sueño, ha revelado que colocar la pijama y la ropa de cama en el congelador durante unos minutos ayudará a las personas a mantenerse frescas a la hora de dormir y, por ende, les permitirá conciliar el sueño rápidamente. Este consejo también contribuirá a reducir los 2 °C de temperatura corporal que se pierden durante la noche.Si no tienes aire acondicionado en tu casa, una muy buena idea es improvisarlo, tarea que no requiere mucha ciencia ni utensilios. Solamente necesitarás un ventilador y dos botellas llenas de hielo que deberás colocar frente al ventilador. Esto ayudará a circular el aire frío por toda la habitación. Sin embargo, si intentas esta estrategia, debes tener especial cuidado de que el agua no entre en contacto con el ventilador, ya que podría derretirse y provocar un severo accidente.OA