El año 2021 terminó muy mal en materia de desapariciones en Jalisco, colocando al estado en el primer lugar nacional con casi 15,300 personas ausentes, pero el año que recién comienza arrancó mucho peor: con maltrato y amenaza de fuerza y detención a madres que esperaban con angustia la entrega de los cuerpos de dos de sus hijos en el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF).Este episodio indignante ocurrió el martes pasado cuando integrantes de Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco (Fundej) se reunieron para acompañar a Consuelo Hernández y Guadalupe Ayala Contreras a la entrega de sus cuerpos que fueron citadas a las 12:00 horas. Como es costumbre en Fundej, muchas más madres se congregaron antes de la cita para acompañar a las madres y familias que recibirían los cuerpos de sus hijos y así acompañarlas a cerrar el duelo. Eran 140 madres y esposas.Pero pasó el tiempo de la cita y muchas horas más sin que les entregaran los cuerpos a las madres que esperaban. Ante este trato burocrático indigno, las madres que todavía permanecían en el Semefo decidieron ingresar a las instalaciones para exigir una explicación por el retraso, según explicó Guadalupe Aguilar, fundadora de Fundej. Pensaban que se trataba de un retraso debido a un trámite del Ministerio Publico.Dentro del IJCF se dieron cuenta que el retraso era originado en el área de Servicio Social de la institución por lo que exigieron concluir los trámites y entregar los cuerpos. En lugar de ser debidamente atendidas, las 32 madres de Fundej fueron amenazadas con ser detenidas, pues al IJCF llegaron varias patrullas y policías.“Es inconcebible que a 32 señoras de la tercera edad nos hayan puesto ese montón de patrullas para amedrentarnos, inconcebible, por lo cual yo voy a poner una queja ante Derechos Humanos. Ya ni siquiera queremos justicia, ya lo único que queremos es que identifiquen a los nuestros y nos los entreguen”, declaró Guadalupe Aguilar, coordinadora de Fundej. Finalmente, ante el justo reclamo de las madres, a las 18 horas, seis horas después de la cita convenida, los cuerpos de sus hijos fueron entregados a las madres Consuelo Hernández y Guadalupe Ayala Contreras.Este duro episodio que enfrentaron estas madres, ilustra el calvario burocrático y la atención negligente que habitualmente tienen qué enfrentar las madres y familiares que buscan a sus desaparecidos. Y si bien hay servidores públicos que cumplen debidamente con sus funciones, la epidemia de las desapariciones, y la proliferación de centros de exterminio y fosas clandestinas, también multiplica los cuerpos que deben ser identificados en los servicios forenses del estado. Pero no se hace debidamente porque no hay los recursos suficientes para detener la epidemia de desapariciones y la crisis forense que desborda al IJCF.Desde que asumió su cargo como gobernador, Enrique Alfaro Ramírez prometió que la atención al problema de los desaparecidos en Jalisco, sería una prioridad en su gobierno. Y aunque hubo un cambio discursivo, la realidad es que el fenómeno de las desapariciones sigue creciendo en el estado, ubicando en la entidad en el primer lugar nacional con 15,304 personas desaparecidas y no localizadas, de acuerdo al registro de la Comisión Nacional de Búsqueda.En lo que va del gobierno de Enrique Alfaro, tres años y un mes, se han registrado 4,008 personas desaparecidas y no localizadas, un promedio de un caso cada 6 horas con 42 minutos, de acuerdo con un recuento del diario Mural (7 enero 2022). Si bien la mayoría de los casos se concentran en la zona metropolitana de Guadalajara, hay reporte de desapariciones en 99 de los 125 municipios de del estado.Por la gravedad de esta situación y porque hay una situación “crítica” en materia de desapariciones, el Comité Universitario de Análisis sobre Asuntos de Interés Público en Materia de Desaparición de Personas de la Universidad de Guadalajara (UdeG) demandó jueves que se declare un “estado de emergencia” en Jalisco para enfrentar este fenómeno imparable.Declarar un “estado de emergencia” parece una medida extrema, pero es justo lo que se necesita para detener y poner fin a esta epidemia de desapariciones que sangra a tantas familias y lastima a toda la sociedad de Jalisco. Urge enfrentar el problema de los desaparecidos con medidas extremas. rubenmartinmartin@gmail.com