Por las prisas o para “bajar unos kilos”, son muchas las personas que se “saltan” el desayuno, aunque esta práctica no sea tan saludable y tenga implicaciones directas en la concentración. Aquí te presentamos por qué.Un buen desayuno, que incluya pan y cereales integrales, lácteos bajos en grasas, frutas y alimentos proteicos, ayuda de manera significativa a aumentar la capacidad de concentración y la salud en general.Debido a la regulación en las concentraciones de glucosa, insulina y neurotransmisores, el consumir el desayuno una o dos horas después de despertar, podría traer para todas las personas beneficios como mayor capacidad de razonamiento lógico y de memoria, aseguran expertos adscritos a la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid.Hay que tomar en cuenta que además de representar un porcentaje importante de la ingesta calórica diaria, el desayuno es el alimento que precede a las horas del día en las que se lleva a cabo mayor actividad, por lo que es esencial.La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda propiciar el hábito del desayuno desde los primeros años de vida y regular la repartición de la ingesta en nuestras comidas a lo largo del día, para evitar el sobrepeso y otras enfermedades.Recuerda que tanto en el desayuno, como en otras comidas, es recomendable limitar el azúcar y la sal para evitar accidentes cardiovasculares.Ahora que ya conoces los riesgos y beneficios de la primera comida del día, no olvides desayunar y llevar una dieta equilibrada según tus requerimientos diarios.Con información de SUN* * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp * * *OA