Sentir estrés y ansiedad sobre el futuro financiero es normal, aun así, esta tensión extra puede ser manejada de la misma manera que la mayoría del estrés cotidiano, lo primero que debemos hacer es tomar una pausa y analizar nuestras emociones en torno al dinero y al futuro.¿A qué persona no le gustaría vivir sin ningún tipo de preocupaciones económicas? ¿Cómo se logra ese estado de bienestar? ¿En qué punto podemos saber que tenemos las capacidades suficientes para que el dinero no sea un problema, sino un medio para llegar a un fin: la calidad de vida? Si bien no existe una receta mágica que nos lleve a lograr ese equilibrio, lo que sí hay son ciertas capacidades que podemos desarrollar para tener un mejor manejo diario del dinero, planificación y elección de productos. Por ejemplo:Observa tus hábitos de gasto y tus patrones de compra. Empieza cuestionando tu relación con dinero, deuda y gasto. Observa qué sientes antes de hacer una compra: tranquilidad, culpa, estrés, etc; finalmente cuestiona si tu compra es una necesidad o un gusto. Idealmente no se recomienda hacer compras si estás triste, enojado, estresado o con hambre, pues son emociones que llegan a dominar las compras de impulso.Sé realista. No lograrás controlar tus finanzas si no eres realista acerca de tus ingresos, tus limitaciones y tus metas. Para evitar o combatir el estrés financiero, debes determinar, entender y organizar tus ingresos, tus hábitos de gasto y tus deudas. Si logras este punto, deberías sentirte orgulloso de dar este paso y de asumir el control de tu bienestar financiero.Administra tu dinero de forma inteligente. Reúne y organiza las facturas y tus gastos por fecha o monto adeudado. Aunque puedes usar papel y lápiz para llevar un registro de los recibos, también hay aplicaciones que pueden ayudarte a darles seguimiento, como la de albo. Elige el método más apropiado a tu estilo de vida.Asume el control de tus finanzas, organízate. Ahora que ya sabes tus ingresos, gastos y deudas, elabora un presupuesto, esto te ayudará a determinar si gastas más de lo que ganas. De ser así, también puede ayudarte a priorizar tus finanzas y ocuparte de ellas adecuadamente.Separa tu dinero para objetivos específicos. Un fondo para emergencias permite solventar gastos inesperados. Es ideal planificar con tiempo y empezar a concentrarte en guardar dinero poco a poco para contar con un fondo que puede ayudarte a evitar el estrés que uno siente en situaciones en las que se necesita dinero de forma urgente o imprevista.Busca ayuda de un experto. Si te resulta difícil administrar tus finanzas solo, busca ayuda de un experto. Puedes inscribirte en cursos de gestión monetaria, pedir a amigos en quienes confías que te aconsejen sobre los métodos que usan para administrar su dinero o recurrir a la ayuda de asesores profesionales para elaborar un presupuesto y una estrategia. Asegúrate de recurrir a una fuente digna de confianza y legítima, que tenga presente qué es lo mejor para ti.Hacer ejercicio o yoga, meditar y dedicarte a tus pasatiempos -como cocinar o leer-, son todas maneras de paliar el estrés cuando te sientas abrumado. Así, puedes desconectarte de tus preocupaciones y dejar que tu mente y cuerpo se relajen. Cuando uno está estresado, es una buena idea tomarse un tiempo para reorganizarse, planificar una estrategia de acción y luego hacerles frente a sus finanzas.Para concluir...El estrés financiero puede ser abrumador y hacerte sentir como si fuera el fin de mundo, pero no es así. Hay formas saludables de abordar el estrés financiero y estrategias prácticas de administración monetaria para evitarlo. En albo creemos que entender el estrés financiero puede superarse de muchas maneras a medida que se avanza hacia el bienestar. Con información de Alejandra Toledo Flores, Head of Marketing de AlboAA