Encontrar un nuevo significado en la pérdida
La tanatología atiende la esencia del ser humano, antes que el diagnóstico
GUADALAJARA, JALISCO (06/NOV/2016).- Perder a una persona cercana o sabernos enfermos de algo que nos llevará a la muerte es una experiencia con la que a veces no podemos lidiar y necesitamos ayuda, sobre todo para saber que hay más que la transición entre vida y muerte.
La médico anestesiólogo y paliativista del Antiguo Hospital Civil, Nidia Rosales González decidió, hace ocho años, estudiar un diplomado en Tanatología para ayudar a los pacientes bajo su cuidado en la Clínica del Dolor del Fray Antonio Alcalde.
“Me di cuenta que la enfermedad no era lo más importante, que al paciente lo que más le dolía era que no estaba con su familia, que iba a dejar a sus hijos, haberse gastado su dinero”, afirma.
Rosales González asegura que al tratar a los pacientes también busca “atender la esencia del ser humano, lo que está atrás del diagnóstico”.
Los tanatólogos no sólo ayudan al paciente a morir, también a los familiares de quienes ya se fueron para que encuentren un nuevo significado en su pérdida.
Como médico, su propósito es dar un tratamiento integral a los pacientes, mismo que espera que sus colegas puedan aprender. “Las máquinas y los avances en la ciencia hacen que nos olvidemos de para qué estudiamos: para que las personas no sufran, y la tanatología nos regresa a ese punto de nuestra vida”.
LA FRASE
"Entonces, me di cuenta que la medicina es importante, pero al paciente le interesa lo que trasciende en la vida, lo que hay más allá de esa posibilidad de morir".
Nidia Rosales González, tanatóloga.