Entretenimiento
Una vida dedicada a la promoción del sentir indígena
La titular del Instituto de Investigación Antropológica Interdisciplinaria recibió el Premio Jalisco 2006-2007
Sin pensarlo, comenzó a adentrarse más allá de lo que se conoce a simple vista, pues en una ocasión alguien le dijo que no podría comprender la antigua historia si no era capaz de bailar. De esta forma, las danzas indígenas se convirtieron en la razón de su existir y al mismo tiempo, en una forma de sanar los cuerpos y mentes de los enfermos, lo que la llevó a transmitir esta enseñanza desde la que fue su primera trinchera: la psicología.
"Mi trabajo está ligado al uso terapéutico y pedagógico de la danza. Esto significa que no solamente es un arte, sino que para la sociedad prehispánica era una forma de estar en armonía en contacto con el universo, con todo lo que nos rodea, con saber cuáles son los elementos que faltan en su vida, porque hay veces que hay gente que está estancada como el agua, o muy apegada a la tierra y le falta aire, o está siempre volando, o todos estos estados del ser humano. Entonces, esto ha sido parte muy importante de lo que es la filosofía y la forma de vida de los antiguos mexicanos", explica en entrevista la titular del Instituto de Investigación Antropológica Interdisciplinaria.
Hoy en día, Elizabeth Torres ha dado la vuelta al mundo, literalmente, con este conocimiento, dictando conferencias dentro y fuera del país y participando en encuentros internacionales de investigación y danzas indígenas.
Y en este tema, se puede advertir que el año pasado participó en un Congreso Mundial de Investigadores logrando hacerse acreedora -junto con su equipo- de un primer lugar por la valía de sus danzas y atuendos.
Es por esta férrea labor que el Gobierno del Estado la distinguió a finales de 2008 con el Premio Jalisco en lo Cultural 2006-2007, hecho que para Torres significa que va por buen camino, aunque sabe también que la lucha por recuperar la identidad indígena debe continuar y quién sabe, quizá algún día logre su cometido de instaurar en las universidades una materia con este tema.
Si bien el hecho de haber recibido el Premio Jalisco es uno de los grandes alcances de la trayectoria de Torres, todavía no se puede hablar de que tenga un significado más allá, por ejemplo abriendo puertas con apoyos para continuar con su labor.
Por ahora, Torres está a la caza de apoyo para concretar una serie de actividades en una exposición de Moctezuma que se pretende abrir en un museo de Inglaterra en el mes de septiembre.
Danza para la vida
Tezcakoawtzin, como se conoce también a Elizabeth Torres, advierte que existen cuatro escuelas elementales de danza, las cuales tienen propósitos específicos. Así, la de Tezcaltipotla, que es a la que ella pertenece, "incita el despertar de la conciencia, vivir en el eterno presente". Y es a partir de esta filosofía que la enseña a otros para fines específicos relacionados con la salud.
Las otras escuelas son: la de Huitzilopochtli, que representa la fuerza de voluntad "todos los días a la misma hora, en el mismo lugar, como el sol"; la tercera es la de Xipetotel, "el cambio, la renovación"; y la última es la escuela de Quetzalcóatl, "que no significa serpiente emplumada, significa quetzali, lo más precioso, y cóatl, la energía; la energía más preciosa sería la vida, entonces se especializa en el estudio de la biología de la vida".
Para los interesados, en la sede del Instituto de Investigación Antropológica Interdisciplinaria (Herrera y Cairo 2732, entre Rubén Darío y Terranova), Elizabeth Torres da clases de esta danza de lunes a viernes, de 8:00 a 9:30 horas, y los miércoles, de 19:00 a 21:00 horas.
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