CIUDAD DE MÉXICO (22/ENE/2017).- A unos días de finalizar el primer mes del año, aún se percibe el ambiente de resaca para regresar al trabajo y para dejar atrás los kilogramos que aparecieron en la época decembrina.Pedro, encargado de un establecimiento al oriente de la Ciudad de México, expresa que el mes de enero es el más complicado para recuperar el ritmo de trabajo y más aún cuando lo hace con cuatro kilogramos de más, lo cuales, asegura, subió durante las últimas fiestas."Más o menos fue lo que subí, eso me dijo el doctor en la mañana cuando fui a checarme la presión. Yo creo que comes más porque tienes más reuniones con la familia, los amigos y los compañeros del trabajo", narra el hombre de 56 años.En promedio, la mayoría de la población aumenta tres kilogramos de peso durante la época decembrina, de acuerdo con la directora académica del Máster Universitario de Nutrición y Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) en Barcelona, Alicia Aguilar.En entrevista, la especialista indica que el primer paso para recuperar el peso ideal está asociado con retomar lo antes posible las actividades cotidianas, así como las costumbres en la ingesta de alimentos."Intentar volver cuanto antes a la rutina, a los hábitos que comúnmente teníamos establecidos, no solo lo que comemos, sino los horarios, las cantidades, las bebidas", explica.La doctora en Ciencias Biológicas detalla que el segundo paso es analizar los hábitos pasados y detectar los puntos que se podrían mejorar, como podría ser el incremento de platillos con más vegetales en cada comida."Es decir, verduras, frutas, arroz, legumbres, la pasta, eso antes que otros alimentos más procesados y con grandes cantidades de azúcares añadidos", enfatiza.Por último, recomienda añadir actividad física y hacer un esfuerzo superior para intentar disminuir el consumo de alimentos en los días posteriores "no hay que plantearse retos muy altos, sino objetivos que uno esté convencido que quiere alcanzar y plantearnos pequeñas metas progresivamente".La profesora de la UOC dijo que las mayores dificultades de la población para concretar los propósitos que cada año se propone, radica en modificar cambios de hábitos, y estos, como su nombre lo indica, no cambian de la noche a la mañana.