Trasladarán a Gordillo a hospital por falta de bótox

CIUDAD DE MÉXICO (15/OCT/2013).- Durante su estancia en la Torre Médica de Tepan, Elba Esther Gordillo se ha mantenido tranquila y su salud no ha tenido alteraciones que la pongan en riesgo, según los reportes médicos. Sin embargo, esta semana será trasladada, por segunda vez, a un hospital privado.

Esto será para que le hagan un trabajo dental, pues la falta de bótox en su rostro, sustancia que le era colocada de manera constante para darle un mejor aspecto, le ha generado modificaciones en su boca, según fuentes del gobierno capitalino.

Revisar su quijada y sustituirle una placa dental es el motivo por el que por segunda vez será trasladada a un nosocomio, desde el 27 de febrero, cuando fue ingresada a un penal capitalino.

El 27 de abril pasado fue llevada a un hospital privado para que le hicieran un estudio del corazón, que el gobierno capitalino, a través de su Secretaría de Salud, no podía practicarle por la falta de instrumental.

Esta vez será sacada del penal femenil y trasladada por personal penitenciario de seguridad de ese centro, confirmaron autoridades locales, aunque no dieron a conocer el día exacto, aunque se prevé que sea de martes a jueves.

Encariñada con bebé

En reclusión, la ex líder magisterial ha estado la mayor parte del tiempo en la Torre Médica de Tepepan, donde son llevados los internos que requieren atención por su estado de salud, ya sea por enfermedad o lesión, y las mujeres que darán a luz.

La profesora vivió una anécdota al interior del hospital de Tepepan, ubicado en Xochimilco, que conmovió al personal penitenciario: mostró su cariño hacia los niños.

El relato refiere que una interna embarazada fue llevada a la Torre Médica donde Gordillo ocupa una habitación. Cuando la mujer dio a luz a su hija, la maestra convivió con la pequeña durante el periodo de convalecencia de la madre.

Se dijo que la mujer, considerada una de las más poderosas del sindicalismo mexicano hasta su detención, tuvo un sentimiento especial por la pequeñita, así que cuando la nena y su mamá fueron trasladadas al Centro Femenil de Readaptación Social, en Iztapalapa, la maestra mostró una afectación emocional que todos notaron.