El silencio de los priistas

La escena ocurrió en una reunión privada, el sábado, entre diputados del PRI y el PAN que integran las comisiones de Hacienda y de Presupuesto para tratar de aterrizar acuerdos sobre el presupuesto 2010. Los priistas, encabezados por su coordinador Francisco Rojas, presentaron su propuesta de recortes al gasto corriente del Gobierno hasta por 80 mil millones de pesos.  

Junto a Rojas estaban David Penchyna, Lerdo de Tejada, Manuel Baltazar Hinojosa, entre otros diputados del grupo económico del PRI. Cuando los tricolores hablaron de recortar 80 mil millones y mencionaron programas como Procampo y Oportunidades, además del presupuesto de la Sedesol, dentro del recorte, los panista brincaron de inmediato.  

Julio Castellanos Ramírez, panista y secretario de la Comisión de Presupuesto, les espetó en la cara a los del PRI: “Eso (los recortes) no podemos aceptarlo. Nos sale más barato comprar a los diputados del PRI que aceptar eso”. El comentario acusador del panista no encontró respuesta de ninguno de los priistas que guardaron silencio ante tan ruda insinuación.  

Cuentan asistentes a la reunión que más bien se indignó otro panista, el presidente de la Comisión de Hacienda, Mario Alberto Becerra, quien se levantó de la mesa y abandonó la reunión: “No voy a quedarme en una reunión donde se hagan esas ofensas”, dijo el panista y se salió. Pero los aludidos, que eran los diputados del PRI, hicieron como que no oyeron la indirecta, muy directa, del secretario de la Comisión de Presupuesto y siguieron en la reunión.  

El dato lo comentan en la propia bancada del PRI donde aún hay molestia e indignación contra el coordinador Rojas y su “burbuja”. Si ya tras la aprobación del aumento al IVA había dudas y todo tipo de comentarios sobre el grupo de economistas del PRI que negoció con Hacienda el paquete fiscal —desde que les dieron prebendas hasta presuntos pagos de cinco millones de pesos por diputado— el comentario no atajado del panista Julio Castellanos sobre “comprar a diputados del PRI”, cayó como bomba en la bancada tricolor.  

Por qué todavía no hay respuesta a una pregunta que muchos priistas, diputados y senadores, se siguen haciendo: ¿Qué fue lo que negociaron Beatriz Paredes, Francisco Rojas y sus diputados economistas para aprobar el aumento al IVA y los nuevos impuestos en San Lázaro? O lo que es lo mismo: ¿a cambio de qué?  NOTAS INDISCRETAS… El jueves 5 de noviembre a las 8 de la mañana, los senadores del PRD deshicieron un acuerdo que habían hecho con el PRI para sacar el nombramiento de Luis Raúl González para la CNDH.


“Vamos con Emilio”, dijo Navarrete a los enviados de Manlio Fabio Beltrones. Cuando los priistas le pidieron una explicación y les dijeron que lo único que harían sería allanarle el camino a Raúl Plascencia, porque Álvarez Icaza no pasaría, la respuesta de Navarrete fue: “Pablo (Gómez) dice que no podemos darles el cargo a los barones de la UNAM”. Y así, al anular a González Pérez, voluntaria o involuntariamente, los perredistas facilitaron el ascenso de Plascencia.