De a veinte por “mono”

Dicen que el instinto policiaco nunca falla. Y así fue. El actuar por demás sospechoso de un par de “veinteañeros” provocó que el olfato policiaco de dos elementos municipales de Zapopan dieran con quienes –tiempo después– fueran acusados de un sinfín de ejecuciones, entre ellas la de un promotor de música grupera y ex conductor de programas televisivos.

Fue la madrugada del pasado 5 de febrero de 2010, cuando fueron detenidos Michel Tomás Cruz Castillo, de 21 años de edad, y David Rico Caballero, de 27 años, ambos procedentes del Distrito Federal, quienes pretendían ejecutar a un hombre dedicado a la venta de pollo.

Su captura se realizó sobre la Avenida Acueducto, del fraccionamiento Puerta de Hierro, y les decomisaron una subametralladora tipo Uzi y una pistola calibre .9 milímetros, ambas con silenciador, además de una motoneta, la cual iba oculta en una camioneta tipo Voyager.

Aparentemente, creían que se trataba de un par de “malandrines” más, de los muchos que habitan en la ciudad. Sin embargo, no fue así, ya que al llevarlos a la Procuraduría General de Justicia del Estado les encontraron relación con el asesinato del promotor artístico apodado “El Escándalo”, así como con otros homicidios más.

Y es que, en relación con el asesinato del promotor de música grupera Juan Carlos Casillas Castañeda, apodado “El Escándalo”, quien también fue conductor de varios programas en el canal de televisión VIDEOROLA, ocurrido en agosto de 2009, en Puerto Vallarta, el par de capitalinos señaló que ambos fueron contratados por un individuo, quien les mostró en una computadora la imagen de la persona a la que darían muerte y les proporcionó el arma que utilizarían para llevar a cabo el delito.

Asimismo agregaron que un día después del crimen, les dieron 20 mil pesos como pago por haber cometido el asesinato, además de otros dos mil que habían recibido para gastos cuando estuvieron en Puerto Vallarta.

Aquella noche del 29 de agosto de 2009, Juan Carlos Casillas arribó a Puerto Vallarta, procedente de Guadalajara, para asistir a una ceremonia religiosa acompañado de su esposa y su hija, en la iglesia María Reina de La Paz, en la Zona de Marina Vallarta. Eran cerca de las 19:00 horas, cuando terminó el acto religioso. En ese momento Juan Carlos se dirigió hacia donde estaba estacionada su camioneta, entonces se le acercó David Rico Caballero a bordo de una motocicleta marca Yamaha tipo scooter con placas del Distrito Federal, quien bajó y le disparó en la cabeza con una pistola tipo escuadra, calibre .40, e inmediatamente emprendió la huida a bordo de la motocicleta, la cual abandonó en la zona de descarga de una tienda de Plaza Marina. En dicho lugar ya lo esperaba Michel Tomás Cruz Castillo a bordo de una camioneta tipo Voyager, en la que se dieron a la fuga.

Tras las investigaciones, el par de sujetos fueron arraigados inicialmente por la División de Homicidios Intencionales y luego por la Delegación Regional de la PGJE en Puerto Vallarta, la que obtuvo en su contra una orden por homicidio calificado en su modalidad de premeditación, alevosía y ventaja, dictada por el Juzgado Segundo de lo Penal en el puerto.

Los sabuesos, al continuar con el escrutinio mental, el par de “chilangos” confesaron más atroces y por demás depravados crímenes, entre los cuales también se encuentra el homicidio de un hombre, cuyo cadáver fue encontrado enterrado en febrero de este año en un predio conocido como Las Ánimas, en el Municipio de Zacoalco de Torres.

Se supo que el occiso era Ezequiel López Rizo, de 23 años de edad, vecino de la Avenida López Mateos, de la colonia Lomas de Guevara, en el Municipio de Guadalajara, quien tenía antecedentes penales por la portación de un arma de fuego.

Los “veinteañeros”, en sus declaraciones dijeron que a él lo mataron en septiembre de 2009 en Zacoalco de Torres, disparándole con un arma de fuego calibre .9 milímetros en la cabeza, y que por este crimen también recibieron otros 20 mil pesos como pago del “jale”.

Y así, sucesivamente, mientras que continúen sacando la “sopa”, los demás crímenes serán descubiertos. Crímenes por los que cobraban de a 20 mil pesos por “mono”.