GUADALAJARA, JALISCO (30/SEP/2016).- Ayer el Banco de México acordó subir 50 puntos base la tasa de interés para quedar en 4.75 por ciento, lo que la acerca a los niveles del 2009 y se desmarca así de la tendencia de la Fed de no aumentar la tasa de interés de Estados Unidos.Es la tercera ocasión que Banxico sube la tasa en el año, la primera vez fue en febrero, cuando pasó de 3.25 a 3.75%, luego en junio la subió a 4.25% y ahora en septiembre la aumentó a 4.75 por ciento, pero ¿qué significa y qué consecuencias traen estos aumentos?Como explicamos el año pasado cuando la Fed (el banco central de Estados Unidos) decidió aumentarla por primera vez desde 2008, la tasa de interés se puede simplificar como el costo del dinero.Este indicador lo dicta el banco central de cada país y es tomado como base por los demás bancos. Es el costo al que se presta el dinero y es lo que pagan los bancos a los inversionistas que compran deuda de un país.Cuando la tasa de interés es baja, en teoría se estimula la economía de un país porque el crédito es más barato y así las personas consumen más. Esta fue la estrategia que tomó la Fed para sacar de la crisis a Estados Unidos. Y aunque para los ciudadanos los créditos pueden ser más baratos, a los inversionistas no les beneficia tener sus capitales donde les pagan tan poco.Por el contrario, cuando la tasa de interés es alta, los ciudadanos verán que los bancos ofrecen créditos más caros y se puede desacelerar la economía al dejar de consumir, pero una tasa más alta atrae a más inversionistas porque les da más rendimiento.Como explica Sofía Macías, autora de Pequeño Cerdo Capitalista, una de las principales tareas del Banco de México es mantener la estabilidad de los precios, es decir, controlar la inflación.Aunque presumen niveles bajos históricos (del 2.73% anual), cuando al inicio del año el dólar empezó a subir a 18 y luego a 19 pesos, les preocupó que esta apreciación sí pudiera afectar los precios de alimentos y medicinas y que los aumentos se volvieran generalizados y no sólo en ciertos productos, es decir, que creciera la inflación.Entonces Banxico decidió en febrero hacer el primer aumento a la tasa de interés aunque la Fed no lo hizo.Aumentar la tasa de interés es una medida para intentar mantener el poder adquisitivo de nuestra moneda en épocas de inestabilidad y especulación internacional.Como dice El Financiero, así se mantiene el atractivo de la deuda mexicana y los flujos de capital extranjero hacia el país.Además, una tasa de interés alta (en teoría) desincentiva el consumo. Las personas gastan menos y ahorran más (de nuevo, en teoría), lo que al final provocaría que el nivel de precios disminuya.Luego de repasar brevemente las explicaciones económicas, estas son algunas situaciones en las que te puede afectar el aumento a la tasa de interés:Los meses que quedan del año serán una “tormenta” financiera para México, como lo expresó el gobernador de Banxico, Agustín Carstens, principalmente por las elecciones de Estados Unidos de noviembre, que tiene a las monedas en la incertidumbre y al peso mexicano en la cuerda floja.Carstens recalcó que el último ajuste a la tasa no es el inicio de un ciclo alcista y que seguirá de cerca la evolución del tipo de cambio, por su posible traspaso a los precios y a la inflación. Sólo queda esperar a ver cómo termina este año y más importante, cuidar nuestras finanzas.EL INFORMADOR / MARÍA JOSÉ VILLANUEVA