La opinión del aficionado

La gira por Europa del combinado tricolor ha servido, entre otras cosas, para ponernos en nuestro lugar. Las televisoras y la prensa nos venden a nuestro representativo nacional como algo que no es, y ahora se dicen sorprendidos y decepcionados por los resultados obtenidos en Europa, cuando la realidad, esperar otra cosa, sería ilógico.

Si no le podemos ganar a Jamaica o a El Salvador en sus estadios, ¿qué nos hace pensar que le íbamos a ganar a Inglaterra en Wembley o a Holanda en Alemania? No señores, nuestra Selección está para darle pleito al que sea en base a garra, entrega, corazón, pero no en futbol, ni talento, en eso no somos de los principales.

Ahí está el juego contra Inglaterra; generamos más opciones de gol nosotros, pero ellos meten las que tienen, y la contundencia en el futbol vale millones.

Yo creo que en el Mundial podemos hacer un buen papel. Por supuesto que se le puede ganar a Francia, Uruguay y Sudáfrica, pero también es cierto que cualquiera de estos, o los tres, nos pueden ganar a nosotros. En el futbol y en todos los deportes nada está escrito, es por eso que es tan divertido, emocionante y apasionante ver un partido y mucho más uno de un Mundial, pero independientemente de los resultados que se obtengan, es claro que estamos a años luz de contar con los jugadores que tienen las máximas potencias como Brasil, Inglaterra, España, o de tener las fuerzas básicas de Holanda, pero honestamente con los millones que ganan los dueños de los equipos, ni se preocupan por eso.

Qué diferente es el equipo nacional cuando Vela, Dos Santos, “Chícharo”, Efraín Juárez, Pablo Barrera e Israel Castro están en el terreno de juego. Espero que Aguirre se anime a enfrentar el Mundial con esta generación de futbolistas que son rápidos, atrevidos y seguros de lo que hacen, y se olvide del “Bofo”, Medina, Cuauhtémoc, Franco y demás. De los mencionados arriba, solamente Juárez, Barrera y Castro no militan en Europa, pero después del Mundial de seguro se quedarán, yo les garantizo que el túnel que le hizo Barrera a un defensor inglés en Wembley, no pasó desapercibido por visores del Viejo Continente, y si no al tiempo.

El juego contra Gambia dejó en claro lo siguiente. A los equipos poderosos los enfrentamos y les peleamos, pero es probable que perdamos. A los más débiles les ganamos. Es por eso que estar entre el lugar 12 y 20 del mundo es nuestro sitio correcto.