Una mirada reflexiva a la migración

GUADALAJARA, JALISCO (20/OCT/2010).- La exposición Los ojos de la memoria que será montada en la Plaza Central de Tapalpa, como parte de las muestras pictóricas que se presentan en el marco del Festival de la Luna, reúne diversas historias a partir de la migración, un fenómeno social de gran impacto en Jalisco.

La muestra surgió a partir del curso de fotografía que impartió Héctor Guerrero, como parte de las actividades previas del Festival de la Luna que se realizará en Tapalpa del 21 al 23 de octubre, bajo el lema “El tiempo del arte”.

Con experiencia y sin experiencia en el manejo de la cámara, habitantes del Pueblo Mágico se inscribieron al curso, donde aprendieron la teoría de la fotografía documental, asignatura que desconocían, ya que la mayoría practicaba más el retrato o la turística, de manera autodidacta.

Un apoyo didáctico fue la proyección del documental Los que se quedan, de Juan Carlos Rulfo y Carlos Haggerman, película en la que se habla precisamente de las personas que deciden permanecer en el terruño, ya que por lo general se habla o se narra la vida de quienes emigran.

“Yo no he pensado en irme, tengo mi proyecto a largo plazo aquí en Tapalpa. En cambio tengo familia que se ha ido a buscar una mejor vida a Estados Unidos. Aquí quiero poner mi negocio y hacer mi vida, es complicado, pero aquí estoy bien”, afirma Luis Gerardo Cruz Martínez, autor de dos de las 14 fotografías de la exposición.

Para salir adelante en Tapalpa, muchos habitantes han puesto negocios relacionados al ramo turístico: hotelería, restaurantes o diversiones. Otros han encontrado “la papa” en la agricultura, tiendas de abarrotes, banquetes o de meseros en restaurantes.

“Es difícil hacerla, pero si uno tiene ganas de salir adelante, hasta con un puesto de elotes la armas”, asevera Luis Gerardo Cruz, de 25 años de edad, quien es funcionario en la Dirección de Promoción Económica del Ayuntamiento tapalpense. Descarta emigrar a Estados Unidos, donde se vive su hermana con su esposo y sus hijos. “Voy a sacar mi visa e iré a visitarla, conocer, pero quedarme allá no, para qué, uno aquí está bien”.

Su pieza fotográfica se titula Automatic & garaje door, en la que precisamente se ve un portón eléctrico, “lo cual está totalmente fuera de contexto en Tapalpa, pero es de alguien que estuvo en Estados Unidos y trae lo moderno al pueblo cuando regresa; es curioso todo ese fenómeno de cuando van al otro lado y luego vienen a su tierra”.

Otra de las participantes es Lupita Flores, estudiante de Administración de Empresas, quien anteriormente hacía fotografía turística y retrato, y se inscribió al curso de Héctor Guerrero “para aprender otra cosa”.

Su fotografía sin título muestra a tres niños en la calle corriendo y jugando, en la que muestra “la ausencia de sus padres, pero que de alguna manera tienen que suplirla con la convivencia e interacción con otras personas, porque no pueden quedarse pensando en que no está su papá”.
La fotografía, señala Lupita, es una herramienta útil para la vida diaria, porque le permite guardar recuerdos de otra manera y volver a verlos cuando ella guste.

“Me pondrá triste o alegre, depende la foto, pero temas sociales como estos te hacen reflexionar sobre el ser humano, sobre la familia, sobre los que se quedan, los que se van… sobre la vida misma”, expresa la tapalpense de 21 años, quien espera con nerviosismo la inauguración de la exposición Los ojos de la memoria, en la Plaza Central de Tapalpa, el próximo viernes 22 de octubre.

Exposición colectiva Los ojos de la memoria / Viernes 22 de octubre, Plaza Central / Festival de la Luna / www.lunafest.com.mx