Descubren decoración neogótica en Templo de Santa Teresa

GUADALAJARA, JALISCO (25/SEP/2012).- Durante más de 100 años, una escultura cubrió una parte de la decoración neogótica de yesería y oro fino del retablo principal del Templo de Santa Teresa, ubicado en las calles de Morelos y Ocampo. Hasta el pasado 5 de septiembre, cuando, gracias al proyecto de investigación de Luisa Herena Tapia Gálvez -realizado con el apoyo del capellán Tomás de Híjar-- se descubrió su existencia.

Fue un encuentro afortunado, pues el proyecto de tesis original -con el que Tapia pretende obtener el título de Licenciada en Restauración por parte de la ECRO-- trataba sobre el estudio del conjunto escultórico que antes yacía en lo alto del retablo. Las distintas piezas representaban la Transverberación de Santa Teresa, esa experiencia mística en la que el corazón de Santa Teresa de Ávila es atravesado por una flecha "con el dardo del amor de Dios".

"La escultura es bastante importante y de muy buena calidad y la vamos a estudiar porque es de finales del siglo XIX y principios del XX, y no se tiene registro de como se hacían las obras de arte entonces", explicó Tapia, quien con los permisos respectivos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), hizo bajar a la Santa Teresa de madera vestida con tela endurecida, con todo y su ángel de los mismos materiales, un resplandor de hoja oro y un conjunto de nubes de tela y plata.   

La mañana en que los trabajadores subieron a los andamios para bajar pieza por pieza, descubrieron que, detrás de la escultura, había una tela cubriendo el retablo neogótico. Este consta de un gran ojival dentro del cual hay tres círculos, cada uno con símbolos distintos, adornados con yesería y oro.

Si bien el templo que por muchos años fue parte del convento de las monjas de Santa Teresa, fue terminado alrededor de 1720, la decoración neogótica se habría hecho a mediados del siglo XIX, explicó Tapia, remplazando un antiguo retablo hecho de oro y madera.

"Nosotros estamos fechando 1904 el año en que se colocó la tela y luego la escultura", agregó la investigadora, de manera que son casi 110 años los que el retablo que ahora se muestra, estuvo cubierto. Y sin embargo, se mantuvo en casi perfecto estado, ya que después del encuentro sólo fue necesario hacer una limpieza superficial y se resanaron algunas partes.

Por el momento, Tapia continúa con el estudio de la escultura en el coro del templo, y próximamente viajará a la Ciudad de México para analizar sus materiales con tecnología especializada. Por lo que respecta al retablo, la investigadora está convencida que "ganó muchísimo", por lo que la idea es que se quede como está y la escultura sea reubicada en el mismo templo.  

Los peritos del INAH, que ya visitaron las instalaciones, aceptaron la propuesta de palabra. Lo que resta ahora es elaborar los trámites correspondientes para hacer formalmente la solicitud.

Dice Tapia que la gente que ha visto la nueva imagen del retablo ha estado de acuerdo en que se quede así, incluso aplaudieron cuando el padre De Híjar comunicó en misa el "fantástico hallazgo". Y a los que preguntan por la Santa Teresa, siempre se les conduce hasta el coro para que vean que se encuentra en un proceso de estudio.

La investigadora invitó a todos los interesados a asistir al templo y contemplar el arte sacro hecho en Jalisco.

EL DATO

El Templo de Santa Teresa, ubicado en Morelos 525 -entre Ocampo y Donato Guerra-- es de la autoría del Obispo Garabito y data de 1720. Tiene una sola torre cuadrangular y dos accesos laterales.    

EL INFORMADOR / EUGENIA COPPEL