Alistan exposición sobre métodos pedagógicos de Paul Klee

CIUDAD DE MÉXICO (17/DIC/2012).- Para marzo del 2013 se llevará a cabo en la Fundación Juan March de Madrid, España, la muestra "Paul Klee. Maestro de la Bauhaus", un homenaje al pintor suizo que influyó a varias generaciones de artistas y de quien mañana se cumplen 133 años de su natalicio.

La exposición se centrará en el desarrollo de los métodos pedagógicos y docentes empleados por Klee entre 1921 y 1931 en la Bahuaus en Weimar y Dessau, señala el sitio especializado en noticias de arte y cultura "hoyesarte.com".

Paul Klee nació en Münchenbuchsee, Suiza, el 18 de diciembre de 1879 y fue hijo de un profesor de música. Inició sus estudios clásicos en Berna dentro de la Academia de Munich, donde tuvo a Franz von Stuck (1898-1900), como profesora.

Klee se familiarizó, de este modo, con las teorías del "Jugendstil", mismas que puso en práctica en la obra "Cabeza amenazadora" (1905). Cuando regresó a Berna, estudió música, gráfica y las obras de Blake, Klimt, Goya en París, Leonardo y Rembrandt.

Según el portal "biografiasyvidas.com", el joven pintor se dio a la tarea de realizar una serie de dibujos inspirados en Van Gogh, Cézanne, Matisse y otros representantes de la escuela francesa. En 1911, conoce al grupo del "Blaue Reiter" (El caballero azul), integrado por V. Kandinsky y F. Marc.

Un año más tarde, Klee expuso a lado de figuras Kubin y Macke, en Berlín. En París, se relacionó con Delaunay, al tiempo que el clima cubista se colocó entre sus más próximos intereses por el movimiento, el tiempo, la luz y el color.

Se focalizó, gracias a un viaje que hizo a Tunicia en 1914, en obras como las de Louis Moilliet y Macke, que daban prioridad a los valores psicológicos de las formas. Klee acogió un sentimiento y una vida espiritual con lo cual desarrolló una prolífica obra.

Cuentan que veía al mundo como un modelo planetario que funcionaba como relojero cósmico, una suerte de "Dios suizo", y lo que fuera su verdad espiritual.

De acuerdo con la reseña biográfica del pintor, publicada en "paulklee.com", ello explicó el carácter de sus fantasías que eran como de juguete, donde el mundo no tiene realidad final, era libre. De ahí su reputación como un "petit-maître". En 1920 ingresó en la Bauhaus de Weimar, ahí fortaleció su método de análisis.

En 1924, junto con Kandinsky, Feininger y Jawlensky, formaron los "Blaue Vier" (Los cuatro azules), quienes crearon imágenes misteriosas de zonas cromáticas acompañadas de tenues signos gráficos. Además trabajó en la Academia de Düsseldorf (1931-1933).

Sin embargo, en 1933 la condena nazi de su obra lo obligó a exiliarse a Berna, donde su obra adquirió un tono simbólico y dramático con elementos que progresivamente se convirtieron en ideogramas, como lo hizo en "Un rostro y también el de un cuerpo.

Klee complemento su obra pictórica con la publicación de "Diarios" y, además, escribió artículos acerca del arte, que son considerados una teoría del arte moderno. En 1936, se le diagnosticó esclerodermia, una grave enfermedad degenerativa.

A pesar de que Klee prosiguió con su obra y a buen ritmo, en 1940, fue internado en una clínica de Muralto-Locarno, donde falleció el 29 de junio de 1940. Actualmente, su obra se halla en el Museo de Bellas Artes de Berna (Fundación Klee).

Si bien, la obra de Klee no ofreció los intensos sentimientos de Picasso, o la maestría formal de Matisse, su línea artística se caracterizó por trazar arañazos alrededor de los bordes de su fantasía y trabajaba dentro de una pequeña brújula de post-cubistas.

De hecho, las ideas de Klee sobre el espacio pictórico que extrajo de la obra de Robert Delaunay, resultaron en felices accidentes en sus lavados de acuarela donde realizó cuidadosas imágenes.

Robert Rosenblum, historiador de arte, dijo que el "genio particular de Klee era, capaz de tomar cualquier número de los motivos románticos y sus ambiciones se habían hinchado a menudo en grotescas dimensiones wagnerianas".