El Gobierno español subrayó que la decisión de no enviar a ningún representante a la toma de posesión de la nueva presidenta de México es por haber excluido a Felipe VI de la invitación al acto y se adoptó en defensa del jefe del Estado.Después de que México no incluyera al rey en esa invitación para la toma de posesión de Claudia Sheinbaum, el Ministerio de Asuntos Exteriores hizo público un comunicado rechazando esa actitud que considera “inaceptable” y adelantó que España no tendrá ningún representante en ese acto el próximo 1 de octubre.La polémica surgió en medio de la Semana de Alto Nivel de la ONU, tanto con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, en Nueva York. Fuentes del Gobierno recalcaron que lo que hizo el Ejecutivo con su comunicado es salir en defensa del jefe del Estado, en una reacción lógica, clara y contundente.Recuerdan que Felipe VI es quien acude a las tomas de posesión de los presidentes iberoamericanos y es reconocido y querido en esa comunidad. Por todo ello, insisten en que el Gobierno ha hecho lo que tenía que hacer ante una decisión que no se entiende, y si México no invita al rey, como respuesta, ha acordado que no va nadie en representación.Luego de que España informó que no enviará a ningún representante para la ceremonia oficial de su toma de protesta como presidenta, Claudia Sheinbaum informó que hoy publicará una carta en redes sociales respecto al tema. CT