Cada año mueren al menos tres millones de personas en el mundo, particularmente varones, a causa del consumo nocivo del alcohol, señala la Organización Mundial de la Salud (OMS).Del total de esas muertes, 28 por ciento son por lesiones, causadas por accidentes de tránsito, autolesiones y violencia interpersonal, 21 por ciento por trastornos digestivos, 19 por ciento por enfermedades cardiovasculares, y el resto por enfermedades infecciosas, cánceres, trastornos mentales y otras afecciones.Para reducir el uso nocivo de esa sustancia, a la que se atribuye cinco por ciento de los decesos mundiales, la OMS ha emprendido una estrategia global que se articula en torno a 10 esferas en las que pueden intervenir los gobiernos a nivel local.Dichas esferas son: liderazgo, concienciación y compromiso; respuesta de los servicios de salud, acción comunitaria, políticas y medidas contra la conducción bajo los efectos del alcohol y disponibilidad de alcohol.Además de marketing de bebidas alcohólicas, políticas de precios, mitigación de las consecuencias negativas del consumo del alcohol y la intoxicación etílica, reducción del impacto en la salud pública del alcohol ilícito y el alcohol de producción informal, seguimiento y vigilancia.El organismo internacional detalló que la estrategia tiene el propósito de “mejorar los resultados sanitarios y sociales de las personas, las familias y las comunidades, al reducir considerablemente la morbilidad y la mortalidad atribuibles al uso nocivo del alcohol y sus consecuencias sociales”.AC