Con un fuerte dispositivo de seguridad— integrado por 15 patrullas y camionetas artilladas de la Policía Federal— la candidata presidencial independiente, Margarita Zavala, visitó la fachada de las instalaciones de Coca-Cola en Ciudad Altamirano, mismas que fueron cerradas la semana pasada debido a las extorsiones por parte del crimen organizado.En un mensaje que dio al bajar de su autobús, Margarita Zavala recordó que hace unos días la empresa Femsa-Coca-Cola decidió suspender sus operaciones indefinidamente en esta planta de Ciudad Altamirano, y esto fue, dijo, por la impunidad y la falta de Estado de derecho.Agregó que esto no sólo pasa en Guerrero, sino en todo México, y por eso se comprometió a conformar un gobierno valiente que enfrente a los delincuentes, al crimen, que no dé amnistía y no sea su cómplice, sino que los lleve ante la justicia."Propongo desde aquí, desde un lugar que puede ser cualquier parte de México, desde un lugar que se siente abandonado por su Estado, propongo profesionalizar y duplicar la Policía Federal, fortalecer en cascada las policías estatales y municipales. Yo tendré la mejor Policía Federal, la mejor capacitada, la más confiable, la más valiente, la más eficaz", señaló."Esto, no sólo le pasa a Femsa, no sólo pasa en Ciudad Altamirano, le pasa a los hoteleros en Acapulco y en Ixtapa; le pasa a los transportistas en Chilpancingo, le pasa a los comerciantes en Iguala; le pasa a los agricultores en toda Tierra Caliente; le pasa la señora que pone unos abarrotes, y los delincuentes le piden en sólo tres meses que lo cierre; le pasa al grupo de jóvenes que quiere poner un restaurante o un taller y son amenazados por los extorsionadores y secuestradores; le pasa a una maestra o directora de una escuela que le avisan que no puede dar clases", dijo.Refirió que el hecho de que se haya cerrado esta planta genera consecuencias como la pérdida de cientos de empleos directos y un impacto innegable en la economía y en el sentimiento colectivo de la comunidad.Margarita Zavala mencionó que Femsa lamentó que la falta de un Estado de derecho y la prevalencia de la impunidad haya llevado a detener sus labores.Resaltó qué hay tres sentimientos "muy profundos" en nuestro país: "hay un gran miedo por la inseguridad y la violencia, una indignación por la corrupción y una incertidumbre por lo económico. Estos tres sentimientos se viven con fuerza en Ciudad Altamirano, en Guerrero, donde la gente vive especialmente con miedo por la inseguridad".JA