Para enfrentar la ola de calor, miles de personas usan ventiladores y aires acondicionados que escasean en supermercados y tiendas departamentales.El sector eléctrico se encuentra contra las cuerdas tras una demanda histórica de 52 mil 823 megawatts que activó un estado de alerta en el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace). La demanda de electricidad, junto con la ola de calor, han creado una saturación del sistema eléctrico que produce apagones en varios estados del país por la antigüedad del sistema, según los especialistas. El Cenace es el organismo encargado de operar el sistema eléctrico nacional. Para que este sea seguro, confiable y entregue energía a todo el país, es necesario que del 100 por ciento de la demanda eléctrica exista una reserva del 5 por ciento, que se pueda utilizar en el momento que lo requiera. El Cenace reportó que la reserva se encuentra peligrosamente cerca del 6 por ciento. Es decir, en este punto “la energía eléctrica no se puede almacenar y se genera exactamente la cantidad que se consume”. Por el momento no se ha llegado a un estado crítico, se espera que la ola de calor en México continúe y, por ende, la demanda de energía se mantenga alta. “Si no se tiene la reserva lista y en condiciones adecuadas, existe riesgo de que si la energía que se está generando sale y no hay como suplirla, el sistema se cae”, señaló. En caso de que la reserva llegue por debajo del 6 por ciento, los siguientes pasos del Cenace serían: Un recorte a las empresas que más consumen electricidad para intentar equilibrar el sistema y mantener la reserva. Aplicar “tiros de carga” en algunas colonias, lo que implica “desconectar partes del sistema de forma rotativa por algunas horas al día” en caso de que reducir la distribución a la industria no sea suficiente. “Antes del apagón masivo, lo que hace el Cenace es desconectar la industria y si no desconectará pequeños pedazos del sistema, dejar unas horas sin energía a unas colonias y luego desconectarlas y dársela a otras”, detalló. En pocas palabras, las autoridades realizarían un esquema rotativo controlado en el que se distribuya dependiendo de la demanda eléctrica y con prioridad para aquellas zonas críticas donde haya, por ejemplo, hospitales o inmuebles que no pueden carecer de electricidad. Aunque se han reportado apagones en varios estados del país, estos no tienen una liga directa a la crisis en la reserva, sino más bien a la infraestructura del sistema eléctrico ante la alta demanda de energía. En el peor escenario, donde el sistema eléctrico opere con menos energía de la que se consume en medio de la ola de calor podría presentarse un apagón masivo que dañe equipos del sistema, aunque es muy poco probable y por ahora con desconectar a la industria debería ser suficiente para recuperar la estabilidad eléctrica. CR