El Senado de la República prevé aprobar la próxima semana una reforma que busca frenar la mendicidad infantil que afecta y la explotación de menores en las calles del país, que afecta a alrededor de 1 millón de niñas, niños y adolescentes, fenómeno que se incrementó a raíz de la pandemia con cientos de miles de menores que dejaron la escuela para subsistir, así como otro porcentaje que ha quedado en la orfandad ya sea porque sus padres fallecieron por COVID-19 o por acciones de la delincuencia organizada.La reforma a Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, establece que corresponde a quienes ejerzan la patria potestad, tutela o guarda ejerzan la patria potestad, tutela o guarda y custodia de niñas, niños y adolescentes “velar por el sano desarrollo de niñas, niños y adolescentes, el cual debe estar libre de condiciones de mendicidad, entendiendo por esto toda situación que implique solicitar limosnas para sí mismos o para un tercero”.Asimismo, la reforma impulsada por la senadora Josefina Vázquez Mota, indica que en esta función también existirá la corresponsabilidad del Estado, ello con el fin de evitar la explotación de los menores con fines de mendicidad.La UNICEF menciona que 6 de cada 10 infantes sufren métodos de disciplina violentos por parte de sus padres, madres, cuidadores o maestros, en tanto que un estudio realizado por la CNDH y el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM señala que 30 mil han perdido a sus padres por la violencia producto de la delincuencia organizada.Datos del Coneval arrojan que la mitad de la población infantil vive en condiciones de pobreza, 3 millones 720 mil se encuentran en pobreza extrema, y uno de cada 10 no asiste a la escuela.Se destaca que, de acuerdo con la medición 2017 del INEGI, 3.2 millones de menores de entre 5 y 17 años tienen que trabajar, y de estos 2.1 millones lo hacen en actividades no permitidas y 1.1 millones trabajan en labores domésticas no adecuadas y en este contexto la mendicidad infantil ya sea producto de la trata de personas o de alguna otra modalidad como la necesidad de lograr la subsistencia familiar, se plantea como un problema en aumento.“En México las niñas, niños y adolescentes enfrentan una situación de rezago social y problemas de violencia que atentan contra su integridad y su desarrollo integral”, argumentó la senadora por el PAN.De acuerdo con el dictamen que se aprobará, la reforma fortalece la legislación secundaria de protección de las niñas, niños y adolescentes, al establecer la obligación de quienes ejercen la patria potestad y la corresponsabilidad del Estado, a velar por el sano desarrollo de niñas, niños y adolescentes, el cual debe estar libre de condiciones de mendicidad, entendiendo por esto toda situación que implique solicitar limosnas para sí mismos o para un tercero.