La titular de la Secretaría de Salud de Nuevo León, Alma Rosa Marroquín Escamilla, informó que si bien la incidencia de COVID-19 está muy por debajo del pico registrado durante el pico de la quinta ola de la pandemia, en los últimos 15 días empezó a darse un incremento notorio en los casos, situación que se reflejó en la acumulación de cuatro defunciones en la presente semana, cuando en las dos semanas previas no se registraron decesos por la enfermedad viral.La funcionaria estatal comentó que la quinta ola de la pandemia de COVID en Nuevo León se registró a partir de mayo y tuvo su pico en junio y julio, declarándose el fin de ésta a partir de agosto.Sin embargo, luego de un periodo de estabilidad con baja incidencia en septiembre y octubre, mostró a partir de mediados de noviembre un aumento paulatino en el número de pacientes, volviéndose a superar la cifra de cien casos diarios, con 108 y 131, los días 29 y 30 de noviembre.Mencionó que esta semana se han acumulado cuatro defunciones, mientras en las dos semanas anteriores no se registraron decesos. Por lo anterior, Marroquín Escamilla hizo un llamado a la población para que siga usando cubrebocas en lugares cerrados, asilos, hospitales, escuelas, guarderías, y en el transporte público.Recalcó que dicha medida no sólo ayuda a prevenir casos de COVID, sino también de la influenza, un padecimiento que ya ha provocado dos defunciones en la Entidad en personas de condición vulnerable por su edad y debido a que padecían otras enfermedades.JM