El Gobierno de Jalisco aseguró que adquirió 26 mil pruebas rápidas de la marca Cellex para la detección de casos de COVID-19. Comenzarán a aplicarse el lunes. Con esto se pasará de 410 a mil 200 test diarios. Se invirtieron 16 millones 558 mil pesos. La administración estatal buscaba hace dos meses la compra de las pruebas rápidas, pero el Gobierno federal bloqueó la importación de unas, mientras que otras no estaban aprobadas, por no ser confiables, por la Administración de Comida y Drogas (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. De acuerdo con el coordinador de Crecimiento y Desarrollo Económico, Alejandro Guzmán Larralde, con el aumento de los test, los empresarios llegarán a 500 pruebas aplicadas a la semana.“Esto no es sólo para las empresas que están reabriendo, sino para todo el sector productivo. Si llega a salir un (caso) positivo (en la compañía), el compromiso es ampliar la muestra”, aseguró.La coordinadora general de Desarrollo Social, Bárbara Casillas, indicó que con la cantidad de pruebas PCR y Cellex se podrá llegar a una tasa de 664 test por cada 100 mil habitantes a final de mes. Una cantidad mayor que países como Costa Rica, Colombia e incluso México.Para realizar las muestras, se tomarán en cuenta características como municipios con más unidades económicas, índice poblacional, de comorbilidad y casos activos.Luego de un periodo notable de confinamiento para evitar contagios de coronavirus, la movilidad en la ciudad comenzó a aumentar desde el 10 de mayo. Hay más gente en bares, restaurantes y parques y hasta más tráfico. Esa relajación repercutió en el incremento de los casos de COVID-19 reportados, pues en un mes se cuadruplicaron: el 28 de abril había 315 y la cifra creció a mil 432 (ante la plataforma nacional).En Jalisco, el aislamiento se redujo 22%, de acuerdo con Google Trends Mobility.Ante este panorama, la Mesa de Salud en Jalisco, integrada por la Secretaría de Salud del Estado, la Universidad de Guadalajara (UdeG) y la Coordinación de Desarrollo Social, recomendó ampliar la Fase 0 al menos 15 días más: en lugar de reabrir los comercios el lunes, aplazar la reactivación al 15 del próximo mes.“Pasar de 60% de aislamiento a 53.35%, cómo se planteaba para reactivar la economía el 1 de junio, no había problema. Sin embargo con 22% nos salimos, y la reactivación (6.65% más), nos pondría en riesgo”, explicó el rector general de la UdeG, Ricardo Villanueva Lomelí.La coordinadora general de Desarrollo Social, Anna Bárbara Casillas, señaló que también recomiendan reconsiderar los semáforos de límites de capacidad hospitalaria y tasa de mortalidad, entre otros, así como los ajustes a los porcentajes de industria, comercio y servicios que reabrirían.“Recomendamos que los giros y lugares que se mantienen en riesgo, por la aglomeración de personas y que violaron la Fase 0 (al abrir sin protocolos) se cierren”, agregó el secretario de Salud, Fernando Petersen.“Que quienes cumplieron protocolos, trabajen y, quienes no tienen los protocolos, se aíslen y cierren porque están poniendo en riesgo el control de la pandemia, así como la gente que sale a cosas que no necesitan. Ese 22% impide que comience la reactivación”, apuntó Villanueva Lomelí.Indicó que, además de las medidas que se siguen en la calle, también se debe sumar el cuidado en casa, pues siete de cada 10 contagios se dan en los hogares. Por ello realizarán un manual para los ciudadanos y plantearon habilitar espacios para cuarentena voluntaria.
