Cristina Morales falleció el 2 de noviembre por las complicaciones que le trajo el dengue.José Alfredo de la Rosa, su hijo, y Sarahí Hernández, su nuera, contaron que ella comenzó con los síntomas a finales de octubre pasado, un día después de visitar a su hermano, quien también fue afectado por la enfermedad en Jalisco.Afirmaron que Cristina tardó en confirmar el padecimiento por la saturación que enfrentaron los laboratorios de las clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) que se encuentran en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).Compartieron que luego de acudir con un médico particular que le recetó el tratamiento, a base de parecetamol y suero, no mejoró y se trasladó al área de emergencias de la Clínica 14 del IMSS, en donde la canalizaron. Horas después murió.Ella fue una de las 49 víctimas en el Estado en lo que va de 2019, de acuerdo con la Secretaría de Salud federal.Esta cifra superó los 48 casos de 2009, año que tenía el registro más alto de defunciones por el vector en la Entidad.“El comité nacional que analiza cada fallecimiento por presunto dengue descartó ya 60 defunciones por esta causa y 78 se encuentran en estudio”, agregó la Secretaría de Salud estatal en un comunicado.En el documento de la Federación se detalló que en todo el país se documentaron 191 decesos por esta causa. Es decir, una cuarta parte ocurrió en Jalisco.En el mismo sentido, el número de casos confirmados hasta el último corte es de 11 mil 687. En comparación el año pasado fueron apenas dos mil 648.La dependencia estatal indicó que 75% de los casos que se incluyeron corresponden a personas que sufrieron la enfermedad “hasta tres meses atrás”. Agregó que el promedio diario de hospitalizados pasó de 25 pacientes en la semana 42 a dos en la 51.El 21 de septiembre, este medio de comunicación publicó que hasta 76% de los casos reportados hasta ese entonces correspondían al serotipo 2 del virus, un fenómeno atípico, pues a nivel nacional lo que prevalece es el 1.Esteban González, investigador del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS), resaltó que el serotipo 2, que surgió en Sudamérica y luego se desplazó a Centroamérica, propicia cuadros más graves y agresivos en los pacientes.