Cada día, el Servicio de Intervención en Crisis (SIC) del Instituto Jalisciense de Salud Mental (Salme) recibe 24 llamadas efectivas de personas que buscan que alguien las escuche, las oriente o las ayude con sus problemas emocionales.En comparación, en 2015 la cifra fue de 19 enlaces reales diarios (que no fueron equivocados o bromas) en los que se pidieron los auxilios psicológicos que actualmente brindan 11 profesionales.A través de intervenciones breves y canalizaciones a servicios de salud mental, los trabajadores de este espacio ayudan a los afectados a dar pasos concretos para enfrentar su crisis y encontrar una solución.Las mujeres son las que más utilizan este servicio gratuito de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ). Las principales complicaciones que refieren son depresión, ansiedad y conflictos de pareja y familiares.Una de las interventoras, María del Rosario Íñiguez Lugo, señaló que está comprobado que una atención a tiempo, aunque sea por teléfono, disminuye las probabilidades de que alguien se quite la vida o cometa algún delito.“El simple hecho de encontrar tras el teléfono a alguien que puede escucharte, que no te está juzgando, que puede comprender lo que te está pasando y orientarte respecto a opciones que tú no querías, ya es mucho, y lo digo no por mi percepción, sino por lo que los mismos usuarios refieren”.En el SIC, una vez que se identifica la causa que origina la situación estresante en la persona, además de darle orientación telefónica, se le deriva para que reciba cuidados médicos de salud mental, o incluso legal cuando los casos tienen que ver con violencia.La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) establecen que los servicios de intervención en crisis y los primeros auxilios psicológicos son pieza clave en la prevención del suicidio.Sin embargo, el SIC atiende otros temas que, aunque no se trata de una pérdida humana o estrés postraumático, son de importancia para los habitantes, como aquellas que tenían un apego especial a su mascota fallecida, la pérdida de un empleo, problemas con un vecino o con la percepción de sí mismos.El jefe del Departamento de Psicología del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS), Francisco José Gutiérrez Rodríguez, destacó que hace falta dar más apoyos presupuestales a este tipo de servicios para que aumenten durante los fines de semana, cuando crece el consumo de alcohol.