Ucrania afirmó ayer que desplegó un sofisticado sistema alemán de artillería, que es la última entrega de armas de largo alcance y alta precisión que Kiev pidió a sus aliados para combatir a las tropas rusas.“Los Panzerhaubitze 2000 por fin forman parte del arsenal de obuses de 155 mm de la artillería ucraniana”, celebró en Twitter el ministro de Defensa ucraniano, Oleksiy Reznikov.Alemania dijo el mes pasado que enviaría a Ucrania siete obuses autopropulsados para ayudar a sus tropas contra la invasión de Rusia.El ejército alemán tiene 100 de estos obuses en su inventario, pero sólo 40 están listos para el combate. Estados Unidos, Francia y otros aliados de Ucrania han prometido aumentar los envíos de armamento pesado, pero Kiev afirma que sólo ha recibido una fracción de lo que necesita y clama por más ayuda militar. La marina rusa bloquea puertos del mar Negro, lo que, según Ucrania, impide exportar millones de toneladas de grano y contribuye a la subida de los precios de los alimentos en todo el mundo.Ucrania aseguró que había bombardeado plataformas petroleras en el Mar Negro utilizadas como “instalaciones” militares por los rusos.Rusia indicó por su lado que había repelido un intento ucraniano de retomar la Isla de las Serpientes, un pequeño territorio en el Mar Negro conquistado por las fuerzas rusas el primer día de la invasión.Además de Toshkivka, Ucrania admitió que había perdido el control de la aldea de Metyolkin (este), adyacente a Severodonetsk, foco de lucha durante semanas y ahora en gran parte bajo control ruso.Una planta química en Severodonetsk, donde se cree que se refugian cientos de civiles, se halla bajo bombardeo constante, advirtieron las autoridades ucranianas.Pero el portavoz del Ministerio de Defensa, Oleksandr Motuzyanyk, declaró a la televisión ucraniana que las fuerzas rusas habían sufrido “pérdidas significativas en la zona de Severodonetsk”.