Japón está listo para comenzar a liberar aguas residuales radioactivas tratadas de su planta nuclear de Fukushima a finales de esta semana. A pesar de que ha habido fuertes objeciones de algunos países y ciudadanos, el Gobierno de Japón ha anunciado que, si las condiciones meteorológicas lo permiten, empezarán este jueves 24 a liberar el agua tratada de la central.La medida se ha adoptado tras una reunión del jefe de Gobierno con varios de sus ministros y algunas partes involucradas. Según el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, "la comprensión del plan está progresando tanto en el país como en el extranjero". Algunos países muestran su apoyo a Japón, sin embargo, hay otros que se oponen firmemente a esto, ya que podría tener un impacto en el ecosistema.La decisión de verter el agua radioactiva se tomó tras una evaluación de la composición del agua que, según el Gobierno de Japón, el procesamiento de líquidos ha eliminado la mayoría de los radionúclidos, excepto el tritio.Este plan ha estado en preparación durante años, con las autoridades advirtieron en 2019 que el espacio se estaba agotando para almacenar el material y que no tenían más opciones mas que liberarlo.De acuerdo con el CNN, cuando finalmente se viertan las aguas residuales, se diluirán en gran medida con agua limpia para que sólo contengan concentraciones bajas de material radioactivo. Asimismo, viajarán a través de un túnel submarino a aproximadamente 1 kilómetro de la costa hasta el Océano Pacífico.Las aguas residuales radioactivas contienen algunos elementos peligrosos, sin embargo, la mayoría de ellos puede eliminarse mediante diversos procesos de tratamiento, según la empresa eléctrica estatal Tokyo Electric Power Company (TEPCO). De hecho, a lo largo de los años, las aguas residuales se han tratado continuamente para filtrar los componentes nocivos extraíbles para después, almacenarse en tanques.No obstante, hay quienes sostienen que aún no hay tecnología disponible para eliminar el tritio radiactivo. Es aquí donde autoridades y expertos tienen opiniones encontradas, ya que tanto TEPCO, el Gobierno de Japón y el OIEA sostienen que el tritio se encuentra de forma natural en el medio ambiente, incluso en la lluvia y el agua del grifo, por lo que las aguas residuales son seguras, sobre todo porque se irán liberando paulatinamente.Por su parte, hay científicos a quienes les preocupa que las aguas residuales, incluso diluidas, pueden dañar la vida marina, ya que los contaminantes se acumulen en el ecosistema. Ken Buesseler, radioquímico marino y asesor del Foro de las Islas del Pacífico advierte de que el sistema de filtración aún "no ha demostrado ser eficaz todo el tiempo", pues hay otros elementos preocupantes que no han sido capaces de limpiarse, como el cesio y el estroncio-90, un isótopo que aumenta el riesgo de cáncer de huesos y leucemia.De acuerdo con el National Geographic, Buesseler y sus colegas, afirman que, tras examinar los datos del TEPCO, "las aguas residuales seguían conteniendo isótopos radioactivos, cuyos niveles variaban significativamente de un tanque a otro, por lo que es injusto decir que se han eliminado con éxito".Retomando al National Geographic, un portavoz del Departamento de Estado expresó un cauto apoyo, afirmando en un comunicado que el país ha sido "transparente en su decisión y parece haber adoptado un enfoque acorde con las normas de seguridad nuclear aceptadas en todo el mundo". No obstante, el portavoz se negó a comentar las preocupaciones específicas sobre la posible propagación de radionucleidos a través del Pacífico hasta las cosas norteamericanas. En ese sentido, los representantes de los ministerios de Asuntos Exteriores de Canadá y México no respondieron a las múltiples peticiones de comentarios al respecto.MM