Malasia recuerda hoy a los 239 pasajeros y tripulantes del avión del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, al cumplirse cuatro años de su desaparición mientras prosigue la búsqueda de sus restos en una zona remota del océano Índico.El aniversario coincide con el rastreo que la empresa Ocean Infintiy, tras acordarlo con el gobierno malasio, realiza desde enero en una zona del Índico que los expertos consideran como el lugar más probable en el que se encuentra el fuselaje del aparato.El primer ministro de Malasia, Najib Razak, reiteró hoy el compromiso de su gobierno para encontrar los restos del avión y promover medidas de seguridad para mejorar la seguridad aérea."Han pasado cuatro años desde la trágica desaparición del MH370 pero los pasajeros y la tripulación que viajaban en el avión ese malogrado día permanecen en nuestras oraciones y corazones", escribió Najib en su página de Facebook."Tal como lo demuestra la última búsqueda que encargamos, seguimos comprometidos con encontrar el MH370 y descubrir el destino de los que iban a bordo", añadió Najib.Ocean Infinity y el gobierno malasio firmaron un acuerdo para reanudar durante 90 días la búsqueda que prevé que la empresa estadounidense sólo cobre si encuentra los restos del aparato, con una recompensa que podría llegar a los 70 millones de dólares.El buque Seabed Constructor, apoyado por el MV Maersk Mariner y con ocho vehículos sumergibles autónomos, ha inspeccionado 16 mil de los 25 mil kilómetros cuadrados de la zona de búsqueda sin encontrar ningún rastro del avión, indicó Ocean Infintiy en su último informe.Esta zona se encuentra al norte del área de 120 mil kilómetros cuadrados que inicialmente se determinó como prioritaria y en la que hasta el año pasado se buscaron sin éxito los restos del aparato.La expedición centra actualmente los sondeos en el sector en el que considera que hay más posibilidades de encontrar el avión de acuerdo con el análisis de algunas piezas recuperadas en la isla francesa de Reunión."Han sido más de 30 días pero el equipo de búsqueda sigue siendo optimista", dijeron dos técnicos de la marina malasia que se han unido al Ocean Infintiy al diario New Straits Times.El equipo internacional de expertos creado por Malasia para investigar las causas del suceso indicó hoy que publicará el informe final después de que concluya la actual operación de búsqueda.Los investigadores señalaron que la publicación del informe detallado de investigación basado en información actualmente disponible ha sido suspendida ya que "cualquier nueva prueba recuperada puede afectar significativamente la investigación"."En el caso de que se encuentre el avión, el equipo realizará más investigaciones", indicó el organismo en el cuarto informe interino que emite desde su creación un mes y medio después del suceso."Si no se encuentra y se decide suspender la búsqueda, el equipo reanudará la finalización del informe y lo publicará en los siguientes meses", añadió.El MH370 desapareció de los radares el 8 de marzo de 2014 unos 40 minutos más tarde de su despegue en Kuala Lumpur rumbo a Pekín, después de que alguien apagara los sistemas de comunicación e hiciera virar el aparato, según la investigación oficial.Hasta el momento, se han recuperado 27 piezas en playas de Reunión, Mozambique, Mauricio, Sudáfrica y la isla Pemba (Zanzíbar), fragmentos que fueron arrastrados por las corrientes del Índico, lo que concordaba con la hipótesis oficial del siniestro.De estos, los expertos confirmaron que tres fragmentos de ala encontrados en Reunión, Mauricio y Pemba pertenecen al MH370, otras siete piezas -incluidas partes del interior de la cabina- lo son "casi con seguridad" y ocho más lo son "con alta probabilidad"."Restos de avión posiblemente del MH370 siguen siendo encontrados a lo largo de la costa sureste del continente africano e islas adyacentes", indicó el equipo de investigación sin añadir más detalles a los revelados el año pasado por el ministerio de Transporte malasio.Las autoridades de Malasia, Australia y China, que asumieron la primera fase de la búsqueda con un coste de más de 151 millones de dólares, acordaron suspenderla en enero de 2017 hasta que apareciesen nuevas pruebas sólidas.