Centenares de miles de personas celebraron hoy la llegada de 2018 en la emblemática plaza de Times Square y presenciaron el descenso de la famosa bola de cristal en los segundos previos al término del año. La bola, de más de cinco toneladas y compuesta de dos mil 688 triángulos de cristal, bajó iluminada con sus luces ecológicas de color rojo, azul, verde y blanco, creando así un impresionante caleidoscopio. El público congregado en la plaza, ataviado con coloridas bufandas rojas, gorros y globos con cintas doradas, cantó y aplaudió la llegada del nuevo año en la Gran Manzana entre una lluvia de más de mil 300 kilos de confeti y fuegos artificiales. La celebración contó con centenares de miles de personas. Las autoridades habían calculado una concurrencia de hasta dos millones, pero las bajas temperaturas, -12 grados Celsius en la medianoche, restaron concurrencia a la fiesta. Se trató de la celebración más fría que vive Times Square desde 1907, cuando el termómetro estuvo a la misma hora a -17 grados Celsius.Las actuaciones de artistas como Mariah Carey, Andy Grammer y Nick Jonas amenizaron la espera a los asistentes, la mayoría de los cuales estuvieron de pie durante más de seis horas con gélidas temperaturas y sin poder moverse de su sitio. Varios cantantes latinos participaron en las festividades, entre ellos la cubana Camila Cabello, el venezolano Chyno Miranda o la estadounidense de origen dominicano Leslie Grace. El cantante estadounidense Andy Grammer fue el encargado de interpretar, poco antes de medianoche, el famoso himno de paz "Imagine" de John Lennon, actuación que precedió al descenso de la bola. Este año la invitada especial fue Tarana Burke, fundadora del movimiento #MeToo contra el acoso sexual, quien, junto al alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, activó el botón Waterford Crystal que hizo descender la esfera justo un minuto antes de la medianoche. Se trata de un gesto simbólico, ya que el botón en sí mismo sólo inicia la cuenta atrás en el reloj, mientras que el descenso de la bola desde una altura de 40 metros se activa desde una sala de control de forma sincronizada. Desde 1996, todos los alcaldes de la ciudad han tenido el privilegio de pulsar el botón junto a celebridades y personajes públicos que son elegidos por su aportación o importancia dentro de una comunidad determinada. Entre los invitados en años anteriores figuran Bill y Hillary Clinton, Muhammad Ali, Lady Gaga y The Rockettes. Como marca la tradición, tampoco faltó el "beso de medianoche" que se dieron las parejas justo después de las doce, un ritual de amor que, según los supersticiosos, evita 365 días de soledad. Las celebraciones estuvieron acompañadas de estrictas medidas de seguridad, con registros en todos los puntos de entrada y fuerzas especiales antiterroristas desplegadas en las calles colindantes. A raíz de los recientes atentados se incrementó la seguridad y se desplegaron camiones llenos de arena y vallas de cemento alrededor de la plaza, y se inspeccionó como de costumbre a los asistentes, que tienen prohibido llevar mochilas, bolsos grandes, paraguas o bebidas alcohólicas. También se instalaron detectores de metales, hubo perros entrenados para detectar explosivos y policías con armas largas. La multitudinaria fiesta de fin de año en Times Square es mundialmente conocida y, pese al frío, muchas personas alrededor del mundo viajan a Nueva York expresamente para presenciar el evento. Los festejos en esa plaza se celebran desde hace 112 años, mientras que el descenso de la esfera, que se ha convertido en todo un icono, se lleva realizando desde 1907. El diseño y los cortes de algunos de los cristales de la esfera representan los atributos de determinación, coraje y el espíritu necesario para triunfar sobre la adversidad. Los dueños del periódico The New York Times comenzaron en 1904 a festejar la entrada del año en la azotea de su edificio, situado en esa misma plaza, primero con fuegos artificiales y a partir de 1907 con una bola iluminada.