El presidente de Estados Unidos (EU), Donald Trump, emitió declaraciones de emergencia para los estados de Georgia, Carolina del Norte y del Sur, ante la inminencia de la llegada del huracán “Dorian”, debilitado a categoría 4 en la escala Saffir-Simpson.El mandatario ya aprobó la declaración de emergencia para Florida el viernes pasado ante la proximidad del huracán, afectando a un millón de personas.Con esta medida, Trump autoriza al Departamento de Seguridad Nacional y la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) coordinar todos los esfuerzos de asistencia para desastres con el fin de aliviar las repercusiones que “Dorian” pueda tener.En concreto, FEMA ha recibido autorización “para identificar, movilizar y proporcionar a su discreción los equipos y recursos necesarios para aliviar los efectos de esta emergencia”.El presidente visitó el Centro Nacional de Coordinación de FEMA, en Washington, donde fue informado de los preparativos ante la llegada inminente del huracán a la costa Este de EU.El domingo, el gobernador de Carolina del Sur, Henry McMaster, ordenó la evacuación obligatoria de las zonas costeras de ese Estado. También el mandatario de Georgia, Brian Kemp, dispuso la evacuación de los residentes de seis condados.Una vez que “Dorian” deje el archipiélago de las Bahamas, situado a menos 100 kilómetros de la costa de EU, está previsto que recorra el litoral de Florida hasta llegar a Georgia y las Carolinas.En la web de los aeropuertos de Palm Beach y Fort Lauderdale, cerrados previo a la llegada del fenómeno, se advierte al público de que sus instalaciones no son “refugios” y se les informa de que en caso de que deban abandonar sus viviendas tendrían que acudir a los lugares habilitados.EFECategoría 5Los científicos clasifican los huracanes en la escala Saffir-Simpson, que va de 1 a 5. Las tormentas de categoría 5 registran vientos de, al menos, 250 kilómetros por hora. Además de los vientos devastadores, los huracanes de esa intensidad desencadenan marejadas catastróficas, causando inundaciones similares a las de un tsunami cuando tocan tierra. Según el Centro Nacional de Huracanes, los vientos sostenidos de “Dorian” alcanzaron casi 300 kilómetros por hora, siendo la velocidad máxima registrada con que un ciclón del Océano Atlántico toca tierra.Historial de tormentas“Dorian” es el quinto huracán de categoría 5 que se forma en el Atlántico en los últimos cuatro años, el lapso más largo registrado con al menos una tormenta de la máxima categoría por año. El último tramo más largo fue de 2003 a 2005. “Matthew”, en 2016. Siguieron “Irma”, que azotó el Caribe y el Sur de Estados Unidos en septiembre de 2017. “Katrina”, que mató a más de mil 800 personas en la Costa del Golfo de Estados Unidos en 2005, también alcanzó la Categoría 5. En 2018, una serie de tormentas catastróficas, incluidas “Florence” y el huracán “Michael” dejaron decenas de muertos y provocaron daños por un total de 32 mil millones de dólares en Carolina del Norte, Carolina del Sur y Florida.Cambio climáticoLos científicos pronostican desde hace tiempo que el calentamiento global generará tormentas tropicales más destructivas, y algunos dicen que la evidencia de esto parece ya estar a la vista. Los océanos más cálidos se suman al aire caliente y húmedo que alimenta a los huracanes, y el mayor nivel del mar aumenta las marejadas ciclónicas que pueden superar las barreras costeras.Funcionarios de la Cruz Roja Internacional estimaron en cerca de 13 mil las viviendas destruidas en las Islas Ábaco, el área del archipiélago atlántico de las Bahamas quefue el primero que sufrió la fuerza del huracán “Dorian” en su camino hacia la costa Este de Estados Unidos.La Cruz Roja cree además que las monumentales inundaciones que se registraron durante la jornada del domingo en Ábaco pudieron provocar además la contaminación de las plantas de purificación de agua de esas pequeñas islas del archipiélago atlántico, lo que supone un enorme riesgo para la población.Las autoridades de Bahamas subrayaron que el peligro recae sobre Gran Bahama, isla que será golpeada por el fenómeno hasta hoy.