Llevó a su "mascota" a una tienda para que le corten las uñas, pero luego de que algunos clientes besaran al animal, las autoridades estatales decidieron que debían acabar con su vida. ¿Por qué?Una mujer llevó a un animal a una tienda de mascotas en la localidad de Auburn, Maine (Estados Unidos) para que le realizaran un corte de uñas, informó el departamento de fauna salvaje local. Atraídos por la rareza del animal, varios clientes se acercaron, lo tocaron y lo besaron.Pero cuando el gerente de la tienda se dio cuenta de qué clase de mascota se trataba, le pidió a la mujer -que no ha sido identificada- que se marchara con el animal, pues en la tienda "no cortan las uñas a los mapaches", explicó el diario The New York Post.El portavoz del Departamento de Pesca Continental y Vida Silvestre de Maine, Mark Latti, explicó que haber llevado el mapache a una tienda de mascotas constituía un riesgo innecesario para la salud pública. Además, las leyes del estado prohíben tener como mascotas a animales silvestres.Al darse cuenta de la presencia del mapache en su local, el gerente de la tienda se comunicó con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Maine y con el Servicio de Vigilancia, que determinaron que la mujer había expuesto potencialmente a los clientes y se había puesto en peligro a sí misma, dado que los mapaches son "uno de los portadores más comunes de la rabia".A modo de prevención, las autoridades determinaron que el animal debía someterse a pruebas de rabia y que tenía que ser sacrificado, además de informar sobre los potenciales riesgos a quienes se encontraban en la veterinaria y se acercaron al mapache aquel día.Si bien el 26 de mayo se informó que el mapache dio negativo a la enfermedad, el animal fue sometido a eutanasia ya que, según argumentaron, no existe alguna prueba no letal para detectar la rabia en los animales.