En medio de un mundo de contradicciones, de dimes y diretes en los que los únicos perjudicados en materia de salud pública resultan ser los enfermos de cáncer, insuficiencia renal, diabetes, problemas cardiacos y otros casos graves, los “juncionarios” de los gobiernos federal y estatal se aferran a declarar, un día sí y otro también, que aquí no pasa nada, que todo está bien, que sus respectivas “revoluciones”, con el apodo que ellos quieran llamarle (que cuarta transformación; que refundación) van a sacar adelante a nuestro país y Estado…mientras tanto, los periodistas, los medios masivos de comunicación y los conservadores, deben de guardar silencio, para no perturbar la paz social.La realidad es que son los improvisados, en los más diversos campos disciplinares de la función pública, los que mantienen y fortalecen las diferentes crisis por las que transitamos todos los mexicanos (pero más los que menos tienen), pues quienes hoy dicen gobernarnos confunden –para su beneficio- lo que es la austeridad: “Una política de austeridad es la política económica basada en la reducción del gasto público. La reducción del gasto público o de los presupuestos también son conocidos como recortes”. Si bien es cierto que no hay presupuesto que alcance para atender a una población tan dispersa como la que hay en nuestro país (más de 120 millones de personas), la realidad es que es la ineficiencia de los nuevos y viejos “juncionarios” la que provoca la mayoría de los males.Mientras tanto, la comunidad médica del país se encuentra dolida y profundamente preocupada, precisamente porque en nombre de la famosa austeridad, los centros de salud, en sus diversas denominaciones (SS, IMSS, ISSSTE), carecen hasta de lo más indispensable en materia de medicamentos, equipo y recursos humanos en el ámbito hospitalario para poder atender la demanda existente, lo que en otras palabras implica la muerte de seres humanos de todas las edades, cuyas cifras son desconocidas hasta por las mismas autoridades, y cuando alguien se atreve a señalar alguna información al respecto, para pronto salen a declarar que “ellos tienen otros datos”.En junio del 2009, en México se produjo un trágico accidente en la Guardería ABC en Hermosillo, Sonora. En el incendio fallecieron 49 niños y 106 resultaron heridos, todos de entre cinco meses y cinco años de edad. El gobernador en turno, el propio presidente de la República y 19 “juncionarios” pagaron las consecuencias políticas y jurídicas por el hecho…hoy ¿quién pagará por todos los perjudicados?APUNTEAyer, miles de mujeres salieron a las calles para “festejar” el “Día Internacional de la Mujer”, y para manifestar su hartazgo por la violencia que ha dado como resultado el asesinato de dos mil 833 mujeres; sólo 726 están siendo investigados como feminicidios… pese a ello, los “juncionarios” insisten en que no pasa nada.