En la administración anterior, a diferencia del resto de los alcaldes, Ismael del Toro, entonces presidente municipal de Guadalajara, aceptó el reto del Comité de Participación Social (CPS) del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) de no designar directamente al contralor, sino que aprobara convocar a un proceso de selección abierto para elegir al mejor perfil de todos los candidatos interesados.Así llegó en la persona de Enrique Aldana López, el primer contralor independiente no sólo del Ayuntamiento de Guadalajara sino de Jalisco, lo que abría la posibilidad de romper con la inercia del papel cómplice de corruptelas que siempre han jugado las contralorías que responden al gobernante o al jefe de oficina de cualquier dependencia gubernamental que siempre colocan en ese puesto a algún incondicional que les cuide las espaldas.La buena noticia es que Cynthia Cantero Pacheco, la nueva contralora del Ayuntamiento de Guadalajara, llega por esa misma ruta, propuesta como el mejor perfil por las y los integrantes del CPS.Esa condición le da a la ex comisionada presidenta del Instituto de Transparencia, Información Pública y Protección de Datos Personales (ITEI) un amplio margen de independencia ante el poderoso alcalde tapatío, Pablo Lemus, quien gobierna sin competidor alguno para convertirse en el candidato naranja a la gubernatura de Jalisco el 2024. Cantero debe aprovechar esa circunstancia para cumplir así “con emoción, profesionalismo e integridad”, como ella misma se propuso el martes que asumió el cargo, su nueva misión en la que también prometió construir un “relato abierto hacia la sociedad sobre el control interno de las acciones institucionales y de las conductas de los servidores públicos” con la “prevención, investigación y sanción de faltas administrativas y actos de corrupción; fiscalización de los recursos públicos; y cultura de integridad y ética pública”.Cantero Pacheco tiene así una clara oportunidad de asumir un papel más protagónico en el combate a la corrupción y dejar el bajo perfil y de silencio que jugó en la última parte como titular del ITEI y ya como parte del comité coordinador del SEA, donde al igual que el resto de los integrantes como las y los titulares de la Fiscalía Anticorrupción, de la Auditoría Superior del Estado, la Contraloría del Estado, el Poder Judicial y su Tribunal Administrativo, nunca alzó la voz para defender y cerrar filas ante el embate del Poder Ejecutivo y Legislativo contra el CPS.Tiene de entrada el reto de investigar y resolver el caso de la compra fraudulenta de los pulsos de vida para mujeres amenazadas de violencia que denunció el propio Lemus de sus antecesores naranjas, y sobre todo la licitación por 792 millones de pesos para el arrendamiento de patrullas que ya congeló un tribunal y que tiene más que enfrentados al alcalde tapatío y al líder de la fracción de Morena, Carlos Lomelí, quien acusó por daño moral al alcalde tapatío por asegurar que condicionó aprobar el presupuesto si le arreglaba permisos de unas bodegas de sus empresas. Dos casos importantes que le abren la chance para llegar, mostrar su voluntad política, su autonomía y valentía, dando un golpe de autoridad que la muestre desde el principio como una verdadera contralora ciudadana independiente a las disputas y los negocios del poder.jbarrera4r@gmail.com