Domingo, 16 de Febrero 2025

LO ÚLTIMO DE Ideas

Ideas |

Muy poco puede hacer México

Por: Israel Macías López

Muy poco puede hacer México

Muy poco puede hacer México

Hay cosas que el gobierno de México si puede controlar y hay otras que no. De nada sirve gastar energía y recursos en tratar de cambiar aquellos fenómenos que nos rebasan y que nos resultan imposibles de cambiar.

Nuestra responsabilidad recae en hacer lo mejor con lo que tenemos en todos aquellos aspectos de la vida pública que sí están bajo nuestro control o en los que al menos, si podemos influir.

Por supuesto, el gobierno de México debe negociar y mantener una postura acorde a nuestra realidad, frente al poderío económico de los Estados Unidos. No solo nuestro principal socio comercial, sino también la primera economía del mundo.

Salvaguardar el flujo comercial sin el mayor de los obstáculos posibles es una de las prioridades que tenemos en México, y todo indica, que el gobierno de la presidenta Sheinbaum así también lo entiende.

Cómo también entiende que el gobierno del presidente Trump está en todo su derecho de expulsar a quienes estén en situación migratoria fuera de la ley.

De poco servirá seguir insistiendo en que son fundamentales para la economía norteamericana. Si ellos están deseosos de expulsarlos y con ello provocarse un daño económico, entonces México no evitará que lo hagan.

La postura del gobierno de México es la adecuada, porque se ajusta a nuestra realidad: recibiremos con lo mejor que tengamos a todos y cada uno de los mexicanos que sean expulsados de los Estados Unidos. Aquí se verá la forma de brindarles algún tipo de refugio y darles algunas facilidades, como documentos o hasta alguna ayuda económica para que puedan regresar a sus lugares de origen o hacer lo que consideren mejor.

Siempre condicionados por nuestra limitada realidad económica y financiera, que nos hace vivir un 2025 con profundas carencias de recursos públicos que han obligado a este gobierno a funcionar con recursos muy limitados, incluyendo el del apoyo a los migrantes, consulados y demás estructura gubernamental que se esperaría que funcionara bien con el tipo de amenazas que lazó Trump desde su campaña.

La batalla por evitar que los migrantes sean expulsados de aquel país es una batalla perdida de parte del gobierno de México. Trump no solo tiene ya la experiencia de un gobierno previo, sino que llegó con un claro mandato popular. Para un número importante de estadounidenses que votaron, la migración ilegal es un problema y se resuelve sacándolos del país.

El gobierno de México entonces le queda recibirlos con lo poco que se les pueda ofrecer, hay noticias de que se les entregaría una tarjeta con 2 mil pesos, como apoyo económico. Y seguir exigiendo que no se den tratos inhumanos o separación de familias.

De lo demás, no hay mucho que el gobierno mexicano pueda hacer.

Las prioridades se limitan a la atención básica de todas las personas que estén siendo traídas al país. Ofrecerles un refugio, algo de comida, asesoría en el caso de trámites y documentos y ya. Dejarles seguir su camino.

Si bien el drama personal y familiar de este tipo de medidas será enorme, es más probable que quienes tengan el verdadero poder de pararlo sean los propios estadounidenses afectados por la pérdida de sus trabajadores migrantes.

Si todas las empresas norteamericanas que se están viendo afectadas por la falta de personal en áreas clave como la construcción, la agricultura o los servicios, levantan fuerte la voz, son las únicos que podrían detener o aminorar los efectos de la política migratoria de Trump.

Si ellos no lo hacen o ni siquiera son lo suficientemente fuertes en su reclamo, entonces el proceso no se detendrá. Eso es por lo que muchos votaron en los Estados Unidos. Los efectos los pagarán tanto allá, como nos tocará pagarlos a nosotros acá.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones