Da la impresión que a los cimientos del “segundo piso” de la Cuarta Transformación que Claudia Sheinbaum quiere construir, los están minando -destruyendo poco a poco- para impedir que el proyecto fructifique. Por lo menos es lo que aparenta, cuando sin estar en las campañas oficiales -aunque ya empezaron desde hace muchos meses- los reveses políticos sufridos por la candidata de Palacio demuestran que no todo será ‘miel sobre hojuelas’ en el tramo que falta hasta el dia de la elección presidencial -2 de junio-.Primero fue la renuncia de Omar García Harfuch a la Secretaria de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México para integrarse a la campaña de Claudia Sheinbaum, con la intención de proyectar su candidatura a la jefatura capitalina, que a la postre -aunque fue el ganador de la encuesta interna del Morena- tuvo que declinar o ceder por cuestiones de género (?) ante Clara Brugada. Esa fue una derrota franca de Claudia, porque Harfuch era su candidato y a ella la pusieron “contra la pared”, demostrando que a pesar de tener el “bastón de mando”, las órdenes se reciben desde Palacio y no de la supuesta “nueva jefa” del movimiento morenista.Y ahora, el revés y sorpresivo giro previo a las elecciones, con la no ratificación de Ernestina Godoy a la Fiscalía capitalina, que era otro pilar en la estructura de gobierno para Claudia y para el soporte del segundo piso de la Cuarta Transformación, lo que representa otra derrota no solo para la candidata, sino para el oficilialismo.¿Reveses que pudieran ser un presagio de lo que puede suceder en la próxima elección?. Podría ser una posibilidad, sin embargo, por más “piedritas” que se le pongan en el camino a Claudia, donde aparentemente se debilita, no está disminuida porque continúa con un apoyo incondicional del presidente López Obrador y se mantiene con una ventaja muy significativa en las encuestas de opinión. Y aunque dicen que los sondeos públicos en algunas ocasiones fallan, es una tendencia que tiene cierta veracidad. Además, a los ojos de los ciudadanos, Claudia ha mantenido una consistente presencia en todos los rincones del país, mientras que Xóchitl Gálvez “por ratos” ha desaparecido del radar y solo aparece de manera intermitente.La verdad es que la esencia del verdadero contenido y un panorama claro de las posibilidades reales de las dos candidatas y de Jorge Álvarez Máynez, desde ayer por la tarde el flamante candidato presidencial de Movimiento Ciudadano -que será solo una comparsa del oficialismo- lo veremos a partir del primero de marzo cuando comiencen oficialmente las campanas y en donde las candidatas podrán dar rienda suelta a sus propuestas. De Claudia, no se esperan muchas novedades; ya sabemos, la continuidad y la “construcción” del segundo piso de la Cuarta Transformación con cimientos debilitados, mientras que de Xóchitl deberá esperarse un “estallido” de proposiciones realistas y diferentes si es que quiere revertir la tendencia que hoy no le favorece.¿Usted, qué opina? Daniel Rodríguezdaniel.rodriguez@dbhub.net