El 18 de enero del año pasado -en este mismo espacio- titulamos la reflexión: “Violencia de los cárteles ya cruzó el Río Bravo”, donde hacíamos referencia a que dos días antes en “Goshen, una pequeña población rural en el centro de California que apenas tiene 5,400 habitantes, seis personas, entre ellas un bebé de 10 meses de edad, su madre adolescente -17 años- y una anciana, fueron asesinadas, en lo que las autoridades califican como un ataque “que creo está específicamente relacionado con el cártel. Un nivel de violencia como este no es el de un pandillero común y corriente. Estas personas claramente fueron baleadas en la cabeza y también en lugares en donde el agresor sabría que ocurriría una muerte rápida. Fue una matanza horrible”, dijo al periódico Los Ángeles Times el Sheriff del Condado de Tulare, Mike Boudreaux. Las seis víctimas, incluido el bebé que se encontraba en los brazos de su madre, tenían el tiro de gracia”.Y esta semana, nuevamente una escena con las características -el sello- de venganza de los cárteles de la droga apareció en un área desértica del condado de San Bernardino -al este de Los Ángeles-, donde se encontró una camioneta con varios impactos de bala y muy cerca seis cadáveres, cuatro de ellos calcinados. “Parece que la marihuana ilícita fue la fuerza impulsora detrás de estos asesinatos”, dijo el sheriff Shannon Dicus. Sólo tres de las víctimas fueron identificadas y son de origen hispano. Y de acuerdo con varias pistas en el área del crimen se logró la detención de cinco sujetos presumiblemente involucrados en la masacre; también hispanos; víctimas y presuntos criminales -todos- posiblemente mexicanos.En un informe de Evaluación Nacional de Amenazas de Drogas de la Administración de Control de Drogas (DEA), se indica que son cinco carteles de la droga mexicanos sobre los cuales esa agencia federal pone atención “por la violencia con la que operan, la capacidad de operación y el impacto que tienen en el trasiego de droga: de Sinaloa, Nueva Generación, la organización de los Beltrán Leyva, de Juárez y del Golfo”.Esta semana, en un despacho de la agencia Associated Press que habla sobre los alcances de los cárteles de la droga a nivel internacional, Venda Felbab-Brown, investigadora principal del Centro Strobe Talbott para Seguridad, Estrategia y Tecnología del Instituto Brookings -organización de investigaciones sin fines de lucro-, dijo que “el modelo de negocios de los cárteles mexicanos en el extranjero es prácticamente una copia del local: asegurar el control de una zona reclutando a bandas locales con ofertas de armas y dinero en efectivo. Después, luchar sin piedad contra el cártel rival por el control del territorio”.Desafortunadamente los escenarios llenos de víctimas y las masacres como represalia a diferencias con el tráfico de drogas se empiezan a convertir de esporádicos en cotidianos en California -considerada la quinta economía del mundo y a punto de desplazar a Alemania de la cuarta posición, según Bloomberg News-, teniendo como origen los cárteles mexicanos, que no sólo exportan el veneno de las drogas, sino también la despiadada y sanguinaria violencia.¿Usted, qué opina?
