A la que de plano ya nadie aguanta es a la diputada de Movimiento Ciudadano, Mirza Flores Gómez, quien se ha distinguido porque cada que toma el micrófono suelta adjetivos para denostar y ofender a sus contrapartes.Ya en varias ocasiones desde la tribuna del Pleno Legislativo ha llamado ignorantes, poco leídos e ineptos a algunos de sus compañeros y nos cuentan que incluso al interior de su bancada empieza a generar animadversión.Esta semana, durante una reunión de la bancada de mujeres, le pidió a la que preside ese órgano, la priista Sofía García, que “tuviera criterio propio”, pues uno de sus asesores intervino en la reunión.Ya hasta el coordinador de Morena, Bruno Blancas, ha agradecido desde la tribuna cuando otros diputados lo han corregido sin tener que utilizar “palabras altisonantes” como acostumbra últimamente Mirza “Alzada” Flores.Ojalá así de firme fuera para defender desde un inicio la desaparición del Instituto Jalisciense de las Mujeres con “criterio propio”.***Mientras en el Congreso del Estado se prepara la mortaja para el Instituto Jalisciense de las Mujeres, la secretaria de Igualdad Sustantiva, Fela Pelayo, alista la guillotina y la chequera.Son 30 los empleados que tendrán que liquidar, lo que calculan costará dos millones 228 mil pesos. Además, habría 10 empleados de reciente contratación que no serán liquidados; trasciende que estos serán los recontratados. El Instituto no se escapa de los laudos y tiene dos pendientes de pago que suman un millón 132 mil pesos.***Gerardo Octavio Solís Gómez, fiscal General del Estado, fue el gran ausente en la pasarela de los 20 apuntados para ser nombrados titular de la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas.De acuerdo con la convocatoria emitida, Solís Gómez era parte del Comité que evaluaría a los aspirantes junto con el jefe del Gabinete de Seguridad, Macedonio Tamez, y el subsecretario General de Gobierno, Alain Preciado; quienes sí asistieron, fueron representantes de colectivos y familias de desaparecidos.Habrá que recordar que el área encargada de dar seguimiento a los casos de personas desaparecidas no tiene autonomía y sí depende de la Fiscalí.