Hay maneras diversas de vivir: optas por el pesimismo o por el optimismo. Tú decides.La ventaja que tienen los que eligen el optimismo, como su estilo de vida, es que llegan a contagiar a los demás con su manera alegre de vivir.En cambio, los pesimistas no hacen más que quejarse y estar enfadados. Lo que a la mayoría nos desagrada.El problema es que estamos rodeados de personas sin buen humor y atrapados en los tratos irrespetuosos y agresivos.Desde los empleados de un restaurante, hasta los choferes de un autobús suelen contestar de mala manera a los que se atreven a hacer alguna pregunta que parece inoportuna. La forma de responder es regularmente inadecuada, hasta de mal modo y grosera. Esa forma de reaccionar es realmente desagradable y por desgracia muy común.Muchos pesimistas suelen justificar sus maneras majaderas de reaccionar, sin ni siquiera estar dispuestos a reconocerlo y mucho menos a cambiarlo.Esta reflexión es una invitación a que hagamos un empeño colectivo por ser más optimistas y promover, esta maravillosa actitud, entre los necios que aún quieren seguir viviendo en el lodo de sus malos modos.El poder del optimismo, puede generar y atraer cambios en los pesimistas, al corroborar que se vive mejor y están más contentos, cuando derrochan esa actitud de alegría y buen gusto por la vida.Si las personas visten bien, arreglan su apariencia y las mujeres invierten tiempo, esfuerzo y dinero en su imagen; por qué no invertir, otro tanto, en mejorar su actitud y dejar de ser los ogros de la familia.Que no se queden en arreglos superficiales y se intente, a fondo, en influir para modificar el estilo de vida y ser mucho más positivos.Así, en vez de criticar, hablar mal de los demás o tener desplantes de personas malgeniudas. Será mucho mejor que hagan un significativo esfuerzo por callar y apagar el fuego de su negativismo.Todos se los vamos agradecer, porque como aquellos que les huele el aliento o les falta desodorante. Así les apesta su actitud y tienen tufos verbales muy desagradables en sus inoportunos comentarios.El optimismo transforma vidas y mejora mucho nuestras relaciones. Hay que intentarlo.