Hoy la oposición está frente a una disyuntiva. Por un lado, el líder del partido que tiene a su cargo organizar el proceso de selección de un candidato de la alianza opositora, el PAN, señaló que debía existir un proceso de filtro para los aspirantes.Marko Cortés refirió a algunos que se trataba de que consiguieran un millón de firmas si se querían mantener como aspirantes, lo que causó polémica.Los aspirantes a la candidatura presidencial de Va por México ya casi son 15 personas.Algunos son del PRI, otros del PAN y al menos uno sin partido.Con este número es imposible una consulta o una elección primaria.Tiene que haber alguna fórmula para reducir ese número.Si el mecanismo deriva de una recolección de firmas o de una elección primaria, en cualquiera de los casos, tendrán ventaja los candidatos que tienen respaldo de aparatos.Si la definición proviene de una encuesta, entonces serán los más conocidos los que lleven las de ganar.Por eso el enfrentamiento entre Lilly Téllez y Santiago Creel. La primera puede ser competitiva en una encuesta, pero lleva la de perder en una elección primaria.En el caso del PRI, no hay una disyuntiva tan clara, pero lo más probable es que si “Alito” Moreno realmente -no es broma- quisiera contender por la candidatura, llevaría la de ganar en un esquema de firmas o elecciones primarias.Si no participara, la competencia podría estar más reñida.En el caso del PRD, sus aspirantes serían testimoniales en una contienda entre los diferentes partidos.Así como hoy se ven las cosas, se están creando las condiciones para que Morena arrase, cualquiera que sea su candidata o candidato.Por si algo faltara, Movimiento Ciudadano se lanzó a una campaña de descrédito del PRI, que no puede leerse sino como una movida para erosionar a ese partido.Los indicios que hay hasta ahora indican que MC va a ir con un candidato propio que no va a tener ninguna oportunidad de ganar.Pero el efecto electoral que pueda tener un candidato presidencial de MC… depende de quién sea.Si fuera algún personaje menor, va a tener la tarea de mantener el registro de MC y preparar el terreno para la gran batalla del 2030.Pero si resultara, que esa candidatura fuera la de algún morenista que defeccionara, particularmente Ebrard o Monreal, entonces le podría hacer alguna travesura a Morena y quitarles varios puntos que podrían ser muy importantes para la definición del balance político a partir del 2024.El proceso de competencia interna de Morena y las potenciales fricciones entre aspirantes colocan al partido del presidente en su momento más débil desde que fue fundado… siempre y cuando hubiera una oposición que considerara que esta elección es como el plebiscito chileno de 1988 y la disyuntiva es la continuidad del régimen o la democracia.Pero, por lo que se ve, la oposición no asume esta disyuntiva y más bien considera que esta elección es una más. Redes sociales: @E_Q_Internet: enriquequintana.comEnrique Quintana