El pasado 17 de junio, el salón El Viñedo se transformó en un lugar de ensueño para recibir a los alumnos de bachillerato del colegio Cumbres San Javier, que celebraron su graduación con una cena de lujo y una fiesta espectacular.Los 600 invitados, entre familiares, amigos, maestros y directivos, se maravillaron con el exquisito menú que consistió en una tostada de atún en aguachile negro, carpaccio de res o filete dijón, según el gusto de cada comensal. El ambiente se llenó de emoción cuando los graduados entraron a la pista con chisperos en las manos y cantaron el himno del colegio, demostrando su orgullo y su gratitud por la institución que los formó. Luego, bailaron el tradicional vals con sus madres y continuaron la fiesta con música variada hasta la madrugada. Sin duda, una noche inolvidable para los ahora ex alumnos, que cerraron con broche de oro una etapa importante de sus vidas.Los graduados lucieron radiantes con sus trajes, que reflejaban su personalidad y su estilo, optando por el clásico color negro. Finalmente, algunos se prometieron mantener el contacto y seguir siendo amigos, mientras que otros se desearon lo mejor en sus nuevos proyectos, pero eso si, todos coincidieron en que el Cumbres San Javier fue una gran escuela para ellos. CP
