¿Por qué hay días en que no para el hambre?

Hay días en que el cuerpo tiene una sensación permanente de hambre durante todo el día. Las causas de esta sensación son variadas y dependen de cada caso. Y si bien existen enfermedades como el Síndrome de Prader-Willi o el Déficit Congénito de Leptina, dos alteraciones cerebrales que provocan una sensación de hambre constante, las razones detrás de esta sensación pueden ser más comunes de lo que se cree.

Si bien hay una conciencia social que suele relacionar el hambre constante con afectaciones exclusivamente relacionadas a los trastornos alimenticios, el problema del hambre constante puede ser derivada de estas otras razones cotidianas:

• Se presenta un cuadro de ansiedad oculta. Este problema emocional suele provocar un aumento considerable de hambre; especialmente si el cuadro se presenta tras haber dejado alguna sustancia adictiva como el tabaco.
• Falta beber agua natural. Aunque parezcan sensaciones que se pueden distinguir entre sí fácilmente, el cerebro suele confundir las sensaciones entre sed y hambre. Por lo que quizá lo que requiera tu cuerpo sea rehidratarse.

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• Hay problemas de dieta; exceso de azúcares refinados. Si se abusa en el consumo de carbohidratos de azúcares refinados es posible que el cuerpo tenga hambre con cierta constancia. Esto debido a que estos alimentos son nutrientes vacíos que no logran saciar por completo.
• Hay problemas de dieta; falta de grasas saludables. Las grasas son indispensables en cualquier dieta saludable, pero no todas las grasas. Las derivadas del aceite de oliva, algunos lácteos, el pescado y otros productos naturales son las mejores.
• Hay problemas de dieta; hace falta fibra dietética. Un material altamente saciante es la fibra contenida en frutas y hortalizas, ya que suele permanecer más tiempo la sensación que con harinas no integrales.

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• Existe hipertiroidismo. Este trastorno subclínico puede provocar nerviosismo, insomnio y pérdida de peso, además de mucha hambre. Es una enfermedad que requiere tratamiento médico, por lo que se debe acudir a consulta.
• Se ha comido de manera desordenada. Si no mantienes una rutina tanto en calidad como en cantidad, regida por un margen de tiempo, es posible que tu cuerpo se descontrole y tenga periodos de mucha hambre pese a ingerir suficiente cantidad, y viceversa; carecer de hambre cuando no haya alimento suficiente.
• Existe mala higiene de sueño. Los niveles de leptina están íntimamente relacionados con la duración del sueño de calidad. 

Estas son solo algunas razones que pueden causar una sensación de hambre "ficticia". Si la sensación se presenta por tiempos mayores a un día, es recomendable que visites al médico.

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OB