La "fiesta" inaugural del Mundial de Rusia 2018 comenzó este jueves en el estadio Luzhniki de Moscú sin grandes pompas pero con el plato fuerte de la actuación del cantante inglés Robbie Williams.El popular intérprete arrancó la ceremonia media hora antes del inicio del primer encuentro.La aclamada soprano rusa Aida Garifullina fue otra de las atracciones de una ceremonia con un marcado tono musical, a diferencia de otras fiestas inaugurales, más inclinadas a grandes coreografías.Antes de que comenzara la ceremonia, el arquero Iker Casillas, capitán de la selección española que ganó el Mundial en 2010, se encargó de llevar el trofeo al césped del estadio Luzhniki. Le acompañó la modelo rusa Natalia Vodianova.La ceremonia fue un cóctel entre los principales exponentes del alma rusa, la música clásica, las bellas artes y el ballet, y los nuevos ritmos de la cultura popular.La estrella del pop británico fue el encargado de animar la fiesta y convertir el estadio en una discoteca con canciones como "Let me entertain you", "Feel" o "Rock DJ".Mientras, el alma rusa estuvo representada por bailarines, pianistas, violinistas y un arpa que puso la nota sentimental a un día de futbol.Uno de los momentos culminantes fue cuando Williams y la soprano rusa Aida Garufillina -que a los 31 años ha conquistado la Ópera de Viena- interpretaron juntos uno de los mayores éxitos del británico: "Angels".EDML