Ante la salida de Agustín Carstens, gobernador del Banco de México (Banxico), el día último de este mes, el PRI en la cámara alta estima que la próxima semana el Presidente Enrique Peña Nieto envíe el nombre de su nominado al Senado, donde deberá recibir la aprobación de dos tercios de sus miembros.De acuerdo con El Financiero, mientras Peña Nieto envía su nominado para dirigir el banco central del país, el plazo para designar al sucesor de Agustín Carstens se agota. “Es muy de esperarse que pudiera suceder a mediados o finales de la próxima semana”, dijo el senador priista Miguel Romo.“Sin poderlo afirmar, desde luego es una suposición nuestra, por los tiempos y porque el Presidente de la República está en una gira en Vietnam, y creemos que a su regreso será cuando se haga formal la propuesta en el Senado”.El Senado debe aprobar un nuevo gobernador por mayoría de dos tercios debe ser antes de que Carstens deje su puesto en el Banco de México el 30 de noviembre para liderar el Banco de Pagos Internacionales.Aunque Carstens anunció su partida en diciembre, el proceso para reemplazarlo se ha extendido debido a las próximas elecciones presidenciales de julio, ya que aumenta la especulación de que el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, podría ser elegido como el candidato presidencial del PRI, y si no, como sucesor de Carstens.Por su parte, Alejandro Ramírez, presidente del Consejo Mexicano de Negocios (CMN), consideró que Carstens dejará una institución sólida pese a los repuntes recientes en la inflación.“Creemos que a pesar de que ha habido un repunte inflacionario este año se han tomado medidas para que nuevamente la inflación converja a niveles como el año pasado”, expresó el también director general de Cinépolis.Para Carstens, existen avances en el control de la inflación y la vigilancia seguirá sobre este indicador para llegar cerca de 3% hacia finales de 2018, con la convicción de que una baja inflación es la principal herramienta para activar la economía del país.ALZA Salario mínimo e inflaciónAgustín Carstens recomendó prudencia ante la posibilidad de un aumento en los salarios mínimos, para que no sea un factor que impulse al alza la inflación. Comentó que el tema del poder adquisitivo del trabajo es una prioridad del Banco de México. “De hecho, la mejor manera para mantener el valor adquisitivo del salario es con el mantenimiento de una inflación baja; ésa una tarea que el Banxico está trabajando”.