El pasado primero de octubre la plataforma de Cobros Digitales (CoDi) sin comisiones del Banco de México (Banxico) comenzó a ser una realidad para 33 instituciones financieras, pero el verdadero reto será lograr que pequeños comercios, tienditas, mercados y tianguis adopten la tecnología, para hacerla accesible a los consumidores. “Las grandes cadenas están ya preparadas para arrancar y serán más pequeñas empresas y el sector informal los que tardarán en reaccionar”, anticipó Carlos Hermosillo, analista especializado en consumo. Actualmente en México 37 millones de personas tienen una cuenta bancaria –39 por ciento de la población adulta– y adicionalmente, hay 70 millones de smartphones, de los cuales, 58 millones pertenecen a adultos, y de estos 24 millones tienen una aplicación bancaria, por lo cual la Asociación Bancos de México (ABM) considera que hay un potencial de bancarización de 34 millones de personas. Sin embargo, Verónica Uribe, analista de Monex, consideró que existen algunas limitantes para la implementación del CoDi, pues aún prevalece desconfianza a compartir datos bancarios y utilizarlos en una aplicación en su teléfono. Además de que los usuarios atravesarán por una curva de aprendizaje. “El consumidor de inicio quizá pudiera ser una cierta barrera, tendrá que acostumbrarse a este tipo de sistemas”, señaló Verónica Uribe, analista de Monex. Los comerciantes enfrentan el reto de digitalizarse y el temor de que al sumarse estarán vigilados por Hacienda, ya que una de las intenciones del CoDi es fomentar la formalización de los comercios. Después el banco del comprador recibe los detalles de la transferencia bancaria, la procesa, y una vez validados los fondos emite el comprobante al comprador y vendedor, todo esto en segundos, sin cobro de comisiones. Interesadas, 50% de tienditas En México se estima que hay poco más de un millón 100 comercios tradicionales como carnicerías, papelerías y tienditas, de las cuales sólo 2 por ciento acepta métodos de pago diferentes al efectivo, sin embargo, 5 de cada 10 negocios manifestaron su interés en digitalizar sus cobros. “Un tema importante es la falta de tecnología, que incluye el aceptar otros métodos de pago como tarjetas o los digitales, pero no están cerrados, el 53 por ciento menciona estar interesado en ofrecer este tipo de servicio”, aseguró Pedro Fernández, vocero de Expo Tendero. En el caso de los 632 mil tenderos afiliados a la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), sus agremiados ven lejano o incluso improbable que pueda prosperar CoDi. “No somos los grandes evasores y lo que se pueda recaudar en este canal no registra una diferencia en la cuenta pública del país, en cambio el darle la oportunidad de que declare lo que pueda es meterlo al contrato de la legalidad”, expuso Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC). Dentro de la onceava encuesta ‘Estancamiento y Carestía 2019’ realizada en septiembre, se reveló que el 59.63 por ciento de los tenderos no saben que es un QR, 54.49 por ciento no cree que vaya a ser exitoso el pago electrónico, y 59.63 por ciento dijo que estaría de acuerdo en cobrar de manera electrónica. Tianguis de la Ciudad de México, para noviembre En el caso de los mercados y tianguis el ejemplo busca ponerlo la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) de la Ciudad de México, pues en noviembre todos los mercados sobre ruedas ya tendrán que aceptar el pago mediante el código QR. “Todo el sistema de mercado sobre ruedas va a tener sistema de cobro digital, tener las dos opciones tarjetas y código QR”, adelantó Gabriel Leyva, director de la dirección General de Abasto, Comercio y Distribución de la Sedeco. En los mercados públicos el trabajo ha sido más lento y la más adelantada es la delegación Cuauhtémoc, donde el 80 por ciento de los mercados ya recibe pagos al menos con tarjeta. “El principal temor que tienen ellos es que una vez que ingresen al sistema bancarizado Hacienda les vaya a tener mucho más observados”, agregó. Central de abastos, bajo demanda Las centrales de abasto del país ven la migración hacia el pagó en código QR como una transición a la que los llevarán sus consumidores. “Los mismos clientes, son los que realmente usarán el pago digital y nos irán forzando a tener esa facilidad de pago”, dijo Ramiro de Jesús Cavazos, presidente de la Confederación Nacional de Agrupaciones de Comerciantes de Centros de Abasto (Conacca). Detalló que de los 55 mil comercios que integran la Conacca solo 1 por ciento recibe pagos con tarjetas, pero el 80 por ciento sí maneja pagos con transferencias bancarias o cheques, esto debido a los volúmenes que comercian.