El gobierno de México está preparado para un escenario adverso en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero la apuesta continúa siendo que el resultado sea favorable, aseguró hoy la subsecretaria de Hacienda, Vannesa Rubio."Todos los países como Estados Unidos, como Canadá, como México, siempre tienen el plan B, el plan C y el plan D, y eso. En política pública siempre se tienen que tener planes para todos los escenarios", indicó la funcionaria mexicana.Consultada sobre si México contempla un eventual resultado adverso en estas negociaciones, Rubio fue clara: "sí, sin duda".La funcionaria, entrevistada en el marco del último día de trabajos de la reunión de otoño del Fondo Monetario Internacional (FMI), apuntó que contra una percepción generalizada, el TLCAN no lo es todo para México en términos de comercio.Recordó que su país está abierto al comercio, a las inversiones, con sólidos fundamentos macroeconómicos y con "pertenencias múltiples" a otros acuerdos como la Alianza del Pacífico, sus tratados con la Unión Europea e importantes lazos con países de Centroamérica y el Caribe.Dijo que además de estos frentes, su país está iniciando diálogos con Brasil y Argentina "y fuimos parte de la negociación del TPP (Acuerdo Transpacífico)"."Somos una economía robusta, que tiene intercambios comerciales muy importantes con el mundo, en particular con Estados Unidos. Lo que queremos, el escenario central, es que el Tratado de Libre Comercio, salga, salga bien y sentimos que tenemos la posibilidad de que salga bien para los tres países", indicó.Sin embargo, reconoció la volatilidad del peso ante algunas señales que han salido de las negociaciones sobre el TLCAN, con lo que la moneda "empezó a sentir un poco la sensación de la expectativa que había respecto a las negociaciones de la cuarta ronda" y presiones geopolíticas globales."Nuestros fundamentos están sólidos. Nuestro crecimiento está bien anclado. La reformas estructurales están ya rindiendo frutos", agregó."Estamos cerca de los tres millones de empleos, y nuestra expectativa de crecimiento para el año que entra es de entre 2.0 y 3.0 por ciento, anclada en 2.5 por ciento, consistente con los analistas que evalúan la economía mexicana", dijo.