La embotelladora Coca-Cola FEMSA (KOF) dio a conocer que determinó cerrar sus operaciones de forma indefinida en Ciudad Altamirano, Guerrero, con el objetivo de preservar la integridad y seguridad de sus colaboradores.En un comunicado, la empresa precisó que la medida fue tomada por la falta de condiciones necesarias para operar de manera eficiente y segura en dicha zona, así como por una reciente agresión injustificada hacia uno de sus colaboradores. Explicó que "la empresa rechaza toda acción de violencia en contra de sus colaboradores, familias y comunidades donde opera; lamenta profundamente que la ausencia de un Estado de derecho la lleve a detener sus labores en un territorio en el que ha tenido presencia por más de cuatro décadas". Recordó que desde enero de este año, los integrantes del Centro de Distribución de Coca-Cola FEMSA en Ciudad Altamirano comenzaron a recibir amenazas y agresiones por parte del crimen organizado, así como afectaciones a las instalaciones de la empresa. JA