Como al animal que representa a su equipo, Max Verstappen se llenaba de bravura en el asfalto del Autódromo Hermanos Rodríguez, pero Sebastian Vettel recordó sus mejores momentos de la presente temporada y tuvo la última palabra.El piloto de la escudería Ferrari logró arrebatarle al de Red Bull la pole del Gran Premio de México y, sumado al tercer sitio que obtuvo Lewis Hamilton, amplió sus escasas posibilidades de seguir vivo en el campeonato.No conforme, el alemán es ahora dueño del mejor tiempo en el Hermanos Rodríguez desde el regreso de la Fórmula Uno a este recinto. El tetracampeón se empleó a fondo para firmar un registro de 1:16.488 minutos, superando por 86 milésimas a Verstappen.“Vaya vuelta que fue, tengo que decirlo. Estoy muy, muy contento. Es complicado este lugar, es muy resbaladizo y complicado hacerlo todo en una sola vuelta”, dijo Vettel al bajarse de su SF70-H, con el que consiguió la pole número 50 de su carrera.Del lado de los vencidos, Verstappen admitió su frustración después de haber estado cerca de la primer pole de su carrera. “Estoy muy molesto, no sé (…) segundo lugar es bueno, pero no de la forma en que quería”, dijo el holandés, que cerca estuvo de perder ese segundo sitio por presuntamente bloquear a Valtteri Bottas en la Q3.El holandés había hecho los méritos suficientes para haber sido el que saliera desde la primera posición este día. En la Q2 de la calificación, superó por medio segundo el mejor tiempo del día, que había hecho Lewis Hamilton en la Q1, pero todo se esfumó gracias a la resiliencia de Vettel, que no dejó de luchar hasta el final.“Max era muy rápido en Q2; no sé de dónde sacó eso, así que teníamos que dar el extra, creo todos. Este lugar es complicado. Es fácil cometer un error, muy difícil encontrar un límite, entender dónde está, saber cuándo empujar, cuándo no, dónde hay que ser cuidadoso; y después él logra ser cuatro décimas más rápido que el resto y te preguntas cómo puedo yo hacerlo. Pero sabía que si podía hacer un buen primer sector podría tener una oportunidad y así ocurrió”, explicó el alemán.Sin embargo, Vettel necesita más que haber logrado la primera posición para seguir vivo en el campeonato, pues requiere de ganar y que Lewis Hamilton termine la carrera de hoy en sexto sitio o peor; quizá haya una posibilidad, pues el británico se clasificó tercero y aún no se siente campeón del mundo.“No he pensado en ello y no lo haré hasta que no lo consiga”, contestó tajante el actual líder del campeonato.Por lo pronto, la ambición de Vettel fue mayúscula ayer, y hoy necesitará de ese mismo deseo y una dosis de fortuna para llevar la pelea por el título más allá de lo que ocurra esta tarde.Alan Rodríguez / EnviadoEmotividad a flor de pielEn la Ciudad de México todo es fiesta. En el Autódromo Hermanos Rodríguez se pueden ver desde aficionados ataviados en el uniforme de su escudería favorita, hasta a coloridas “catrinas” dando información a los asistentes con música sonando en todo momento, pero dentro de toda esta fiesta, los organizadores han decidido brindarle un espacio a todas las personas afectadas y a los fallecidos por los sismos de septiembre pasado.Ayer por la mañana, los organizadores anunciaron que se pedirá a los asistentes a la carrera de hoy que, durante la vuelta 19, levanten el puño, pues este gesto se convirtió en el máximo símbolo de las labores de rescate realizadas por cientos de voluntarios.Además, en la ceremonia previa a la carrera el Himno Nacional será interpretado por un coro integrado por niños y jóvenes de Oaxaca, una de las zonas que fue más golpeada por los sismos.Pero se debe destacar que el apoyo de la FIA y la Fórmula Uno no se ha quedado en palabras y gestos sentimentales, pues se anunció que harán una donación de 600 aulas temporales y útiles escolares que ayudarán a que nueve mil niños regresen a clases. Estas 600 aulas se dividirán en partes iguales en Oaxaca y Chiapas.
