“Héroe, leyenda y señor”. La Fórmula Uno perdió al austriaco Niki Lauda, fallecido el lunes a los 70 años, una de sus figuras históricas, marcada para siempre por el milagro de 1976 y sus tres títulos de campeón mundial.“La Fórmula Uno no ha perdido solamente a uno de sus más grandes representantes, también a uno de sus héroes”, señaló Chase Carey, presidente de la categoría reina del automovilismo.“Su amor por las carreras y el coraje que mostró fueron simplemente extraordinarios e inspiraron a muchos aficionados. Su muerte es una gran pérdida para toda la familia de la Fórmula Uno y para el deporte motor”, añadió.Jean Todt, presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), dejó sus condolencias en Twitter: “Niki Lauda fue un héroe del deporte motor, que me inspiró en mi juventud. Es una de las referencias de la historia de la Fórmula Uno”.Andreas Nikolaus Lauda, conocido como Niki, nació el 22 de febrero de 1949. Pasó al menos 47 años en los paddocks, desde el primero de sus 171 Grandes Premios como piloto, con la escudería March en su país, Austria, en 1971, hasta el verano de 2018, en el que un trasplante pulmonar le alejó definitivamente del garaje de Mercedes, del que era desde 2012 presidente no ejecutivo.Toto Wolff, presidente de Mercedes, habló de un hombre “irremplazable”: “Nuestro equipo ha perdido a uno de sus guías espirituales.“Como socio desde hace seis años y medio, Niki siempre ha tenido una honestidad y lealtad sin faltas. Ha sido un privilegio tenerlo en el seno de nuestro equipo y muy emocionante ver hasta qué punto ha sido importante en el éxito del equipo”, añadió.
