El Real Madrid cayó derrotado por 4-3 en su visita al Etihad Stadium, casa del Manchester City, en la Ida de las Semifinales de la Champions League, pero no todo es negativo y es que el resultado les permite llegar con vida al cierre de la Eliminatoria en el Santiago Bernabéu. En gran parte, el resultado no habría sido posible de no ser por Karim Benzema, quien marcó un doblete y puso en boca de todos su segundo gol que significó el 4-3 final. El delantero galo se puso de frente al balón para cobrar un penal marcado tras la mano de Aymeric Laporte, y aunque en la memoria de todos estaban los dos recientes penales fallados por Karim en su último partido frente al Osasuna, la cabeza de Benzema estaba más que fría y con un genialidad en mente. El árbitro silbó, Benzema tomó carrera y ante el lance de Ederson hacia su costado izquierdo, el francés con una sutileza al alcance de muy pocos picó el balón y lo mandó al fondo de las redes. Un gol que deja al Real Madrid con signos vitales y con la oportunidad de remontar la Eliminatoria de la Champions League ante el Manchester City de Pep Guardiola en el Santiago Bernabéu. JL