María Guadalupe Rojas Ladrón de Guevara ha sido una de las mayores coleccionistas de trajes típicos mexicanos a nivel nacional, por lo que el viernes 26 de octubre se le realizará el homenaje “Mosaico Mexicano”, en el Teatro Degollado a las 18:00 horas.La investigadora del folclor mexicano falleció hace unos días, sin embargo, el director del homenaje, Bogard Eduardo García, comparte que no será una pleitesía póstuma, puesto que dicho proyecto se estaba preparando desde hace tiempo, y María Guadalupe estaba lista para asistir. El evento se realiza de manera privada, sólo para familiares y amigos cercanos a la investigadora, quien empezó su labor de recopilación y colección de trajes típicos de todas las regiones de México desde 1970.Bogard detalla: “(En el evento) sí voy a pedir un minuto de silencio porque es el respeto a alguien que quiero mucho. Es una persona a la cual yo conocí en 1970, ella se dedicó desde los 17 años a investigar la elaboración de los trajes típicos, desde el telar, el deshilado, todo ese tipo de cuestiones, donde además de saber del procedimiento, ella iba escribiéndolo”.Recuerda que en sus inicios como coleccionista e investigadora, María Guadalupe hacía desfiles de trajes típicos, sin embargo, cuando a él lo invitaron a participar como bailarín, le dijo que también les podía dar movimiento a sus vestuarios, bailando y es así como inician con el proyecto “Mosaico Mexicano”.“Ahora vamos a participar (en el evento) algunos de los pioneros, de los iniciadores, porque ella fue cambiando de modelos. La temática era modelar trajes, por ejemplo de Guerrero, y luego hacer la pieza de baile de ese Estado. Ella presentaba su ‘Mosaico Mexicano’ a los congresos, para doctores, arquitectos, gente que venía de diferentes partes de México o del mundo, era un evento totalmente privado en diferentes lugares y muy buenos”.El dinero que a ella le pagaban por estos eventos, explica Bogard Eduardo, iba directo a casas de asilos, orfanatos o instituciones religiosas, “ella siempre veía cómo hacer el bien al más necesitado, era muy caritativa, piadosa y llena de amor hacia los más vulnerables, en diciembre llenaba su camioneta de cobijas y en la periferia las repartía; en enero, para el Día de Reyes, llevábamos pelotas a los niños”.Ahora que este acervo se queda con la familia de María Guadalupe, a Bogard Eduardo, con el permiso de ellos, le interesa hacer un libro bibliográfico con la actual iconografía que cuenta a raíz de esta colección y también poner una sala que lleve el nombre de ella, en la que estén permanentes al menos 50 vestidos en exhibición, sobre todo los ajuares que son de las comunidades indígenas.“Ella viajó por más de 40 años y se dedicó a recabar información de los trajes típicos. A nosotros nos deja un gran legado y una huella profunda en nuestro corazón. Yo estoy muy emocionado porque sé que va a ser muy emotivo su homenaje”. Durante el desarrollo de la velada al menos serán 10 parejas modelando y bailando los trajes típicos.Eduardo detalla que la investigadora nació en la Ciudad de México en 1933, sus padres eran tapatíos. Fue la única mujer entre cuatro hermanos. A los 14 años llegó a Guadalajara y a los 17 comenzó a interesarse en los trajes típicos. Toda su vida la dedicó a esta actividad y a la filantropía.
